Pedro Rocha, que ha acudido este viernes a declarar en calidad de testigo, ha salido del Juzgado de Majadahonda como imputado por el Caso Brody. Además, esto se produce cuando el próximo lunes 15 de abril iba a ser nombrado Presidente de la RFEF tras ser el único candidato que reúne todos los avales necesarios.
La jueza investiga los contratos de la RFEF por la Supercopa de España en Arabia Saudí durante la etapa en la que Rubiales fue presidente (2018-2023), pero Rocha en ese momento ejercía como vicepresidente. Tras la salida de Rubiales, Rocha asumió el cargo de presidente de la Comisión Gestora de la RFEF hasta hace solo unas semanas, que renunció para presentarse a las elecciones. Actualmente, el puesto lo ocupa Rafael del Amo.
La semana pasada, la RFEF convocó elecciones para el próximo 6 de mayo, pero Rocha es el único candidato que ha conseguido reunir todos los avales. Por eso, ya es presidente virtual y el próximo lunes iba a ser nombrado presidente de la RFEF. Sin embargo, su imputación cambia las cosas.
Cuando ha llegado al juzgado este viernes para declarar como testigo, la jueza le ha comunicado que ahora forma parte del Caso Brody como imputado. En su declaración, Rocha ha cargado cualquier responsabilidad sobre Rubiales y su persona de confianza, Tomás González Cueto.
Además, ha insistido en que todos los contratos pasaban por él, contratado como asesor exerno y nombrado «comisionado» para controlar las adjudicaciones. Es más, Rocha admite que se enteró de las comisiones que se llevó Gerard Piqué por la prensa, a pesar de que en ese momento era vicepresidente de la RFEF.
«Estoy tranquilo y vengo a colaborar con la Justicia«, afirmó justo antes de entrar al juzgado. Además, está convencido de que el TAD no le inhabilitará.