Una escalada de crudos asesinatos desata la alarma social en Argentina
Las protestas se desarrollarán entre hoy y mañana, viernes, en la periferia de Buenos Aires y culminarán el próximo miércoles con una manifestación en la emblemática Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, sede del Gobierno argentino.
La tensión por la inseguridad se recrudeció la pasada semana, cuando la popular presentadora de televisión Susana Giménez abrió una polémica sobre la aplicación de la pena de muerte tras el crimen de uno de sus colaboradores, que fue atado de pies y manos por sus agresores y lanzado a una piscina donde murió ahogado. "Termínenla con la estupidez de los derechos humanos. El que mata debe morir", dijo Giménez, quien posteriormente aclaró que no estaba a favor de la pena de muerte.
Sus declaraciones provocaron un aluvión de críticas, tanto del Gobierno como de distintos sectores sociales, y la presentadora tuvo que matizar más de una vez sus comentarios.
Cuando parecía que se rebajaba el debate, el asesinato, en la noche del martes, de un profesor de educación física al que dispararon en el rostro tres delincuentes que robaron su camioneta, volvió a encender la controversia. El popular cantante Roberto Sánchez, conocido como Sandro, justificó el miércoles las declaraciones de Susana Giménez con una frase lapidaria: "El que diga que Susana estuvo mal que se corte un dedo de la mano.¿Por qué tenemos que ser hipócritas?", se preguntó.
Reacciona la presidenta
La reacción no se hizo esperar y hasta la presidenta argentina, Cristina Fernández, entró en el debate para admitir su preocupación. "El empleo tiene mucho que ver con el tema que tanto nos preocupa a los argentinos, que es la seguridad", dijo durante un acto público este miércoles. "En lugar de quejarnos y pelearnos tenemos que arremangarnos para ver cómo podemos sortear este inconveniente", añadió la mandataria.
En este clima de alarma social, especialmente delicado en un año electoral como el que vive Argentina, organizaciones ciudadanas optaron por convocar movilizaciones vecinales en demanda de soluciones al problema. "Si a la hora de la condena la sensación que queda es que hay permanentemente un criterio de liberar, de no condenar, se produce sensación de impunidad", comentó hoy Massa.
Las declaraciones del jefe de Gabinete no deben haber gustado demasiado a los jueces argentinos, que han denunciado con insistencia los obstáculos que encuentran para desarrollar su trabajo.
El sistema penal argentino "vive un momento catastrófico debido a que, por las constantes modificaciones, hoy no hay Código Penal", afirmó el ministro de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Zaffaroni al diario "La Nación". El magistrado cargó también contra los medios de comunicación que, afirmó, "nos bombardean con noticias rojas y crean una realidad en la que el enemigo principal es la inseguridad urbana".