El pleno del Congreso ha aprobado este jueves el proyecto de ley de bienestar animal, que ha creado mucha polémica debido a su exclusión de los perros de caza y a las enmiendas incluidas en el Senado.
La ley se ha aprobado con la ausencia de la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, impulsora de la normativa, y entrará en vigor seis meses después de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Exclusión de los perros de caza
La nueva ley de bienestar animal no incluye a los perros de caza, lo que significa que quedan fuera de la protección todos los perros que realizan algún tipo de actividad profesional, como los perros policías, del Ejército, de trabajo, de asistencia, perros guía, de caza y pastores, además de la cetrería y el tiro al pichón.
El Ministerio de Agricultura tendrá que elaborar una norma específica para cada uno de ellos, ya que se entiende que están expuestos a mayores peligros que los domésticos.
Exclusiones de la ley
La ley también excluye los espectáculos taurinos, los animales utilizados en experimentación científica, las aves de cetrería, los perros pastores y de guarda del ganado y los perros de rescate y de las Fuerzas de Seguridad.
Prohibiciones
La ley trae consigo prohibiciones bajo sanción de hasta 200.000 euros. Ya no se podrán organizar peleas de gallos, circos con animales salvajes, ni crías de animales por parte de particulares. Tampoco se podrán tener animales en escaparates.
Listado positivo de animales de compañía
La norma conllevará la aprobación de un “listado positivo de animales de compañía” en los próximos meses. Las especies que no estén incluidas se considerarán “animales silvestres en cautividad y no se permitirá su tenencia, cría o comercio, salvo en el caso de las autorizaciones específicas”. Esto se hace para evitar que se vendan especies invasoras. Perros, gatos y hurones serán considerados mascotas.
Infracciones y sanciones
La norma establece sanciones de hasta 200.000 euros por infracciones muy graves, como vender perros y gatos en tiendas de animales, usar fauna silvestre en circos, la eutanasia con medios inadecuados o por personal no cualificado o la muerte del animal siempre que no sea constitutivo de delito.
Será infracción leve (multas de 500 a 10.000 euros), por ejemplo, no comunicar la pérdida o sustracción de un animal o no esterilizar al gato. Y dentro de las infracciones graves (de 10.001 a 50.000 euros) se incluye abandonar los animales, no recogerlos de los centros veterinarios, mantenerlos de forma permanente en terrazas o balcones, etc.
Cría de perros
La cría de perros solo podrá ser ejercida por aquellos que estén inscritos y certificados como criadores profesionales. En caso contrario, el dueño podría enfrentarse a sanciones de entre 500 y 10.000 euros.
Los dueños no inscritos como criadores tendrán que adoptar las medidas necesarias para evitar la reproducción incontrolada de los animales de compañía. La esterilización será obligatoria en todos los casos para los gatos antes de los seis meses, que además tendrán que ser identificados con microchip.
Registros y supervisión
Todos los dueños de perros deberán pasar un sencillo test de conocimientos caninos. El test va a tener tres partes, una de cuidado y veterinaria, otra de bienestar animal y otra de legislación.
Además, quienes cuiden a un perro deberán tener un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros. El registro de animales de compañía será necesario para todos los animales que se establezcan en el listado positivo de animales de compañía. Todos los perros, gatos y hurones tendrán que llevar un microchip y las aves serán identificadas mediante anillado desde su nacimiento.