Los pechos de Candelas no la salvan de la nominación

Las dos expulsiones de la velada, en las personas de Álvaro y Pablo, tendrían que haber sido el argumento principal de la gala de este jueves de Gran Hermano, pero al final los protagonistas terminaron siendo los senos de una de las concursantes, aunque éstos no consiguieron librarla al final de la expulsión.

Candelas parece estar enamorada de sus pechos, y aprovecha cualquier circunstancia para tocárselos o intentar enseñárselos al resto de miembros de la casa, sin reparar en que sean del género femenino o masculino. 

Y es que quizás la chica oyera a una de sus compañeras soltarle a las cámaras de la casa la frase "¡Qué pesada con los pechos!", algo que comentaron Bárbara y Meritxell después de haber tenido que 'soportarla' un rato a la asturiana, y por eso intentó confirmar su admiración por esa parte de su cuerpo con un compañero. 

Así, Candelas hizo amago de enseñárselas a Pablo, mientras le decía “son tan guapas, mira…”. Pese a ello, a la audiencia no parecen gustarle mucho, o se han cansado ya de ellas, y por eso la concursante terminó siendo una de las nominadas para la expulsión de la próxima semana, junto, precisamente, a Bárbara y Meritxell, otras dos que están más que hartas de tanta exhibición senil.

Por otra parte, la madrugada en Guadalix dejó también descontentos a Pol y la propia Bárbara, porque escucharon ataques hacia ellos del exterior de la casa en Guadalix de la Sierra, con frases como “Pol, falso” y “Bárbara, mentirosa”, aunque rápidamente fueron silenciados por el hilo musical de la organización. 

Cuando menos, Bárbara intentó sacar el lado bueno de la situación y terminó diciendo a sus compañeros que "lo bueno es que hablen de ti". Habrá que ver dentro de siete días si es o no cierta su predicción.