La liga se tiñe de blanco
La liga, cuando ha comenzado a jugarse la segunda vuelta, tiene cada vez más color blanco y más después del grave tropiezo del Barça frente al Villarreal donde no pasó del empate a cero. El Barcelona llegó en su peor momento a El Madrigal. Magullado por la eliminatoria copera contra el Madrid y sin esa pizca de confianza que le ha sobrado en los últimos años. Los de Guardiola sufrieron las secuelas de la copa ante su eterno rival, el Madrid que se dispara a siete puntos. Como si esos malos minutos del miércoles en el Camp Nou hubieran agrietado su fortaleza mental. Desarmado, además, por el mejor Villarreal de la temporada, un equipo vigoroso y solidario que le plantó cara a este Barcelona descompuesto.
El Real Madrid ha salido mejor parado de su enfrentamiento copero. Ha salido más fortalecido a pesar de caer eliminado. Y es que el equipo de Mourinho por primera vez en los últimos tres años dio un baño al Barcelona. Sólo la mala actuación de colegiado impidió que no se clasificase para las semifinales.
Vistos los resultados de la jornada 21 de liga, el que ha salido más perjudicado del doble enfrentamiento copero ha sido el conjunto de Guardiola. En Villarreal con ese empate a cero puede que haya perdido la liga. No estuvo fresco el Barça y la escasez de una plantilla que ya desde el inicio de temporada ya se adivinaba muy corta, por capricho de Guardiola, le puede pasar factura. No todos los años se tiene la suerte que ha acompañado al Barcelona en el último trienio sin apenas lesionados de importancia.
El Real Madrid merced a su triunfo sin gloria ante el Zaragoza por 3-1, en una faena de aliño, se aleja ya a siete puntos. Mucha diferencia teniendo en cuenta que es difícil que los de Mourinho pierdan dos partidos en lo que resta de temporada, y que el Barcelona gane todos. Los de Guardiola, están como fatigados, no están finos y más después de ofrecer una mala imagen en el encuentro contra el Madrid, en la copa. Pasó a las semifinales pero ha quedado tocado. Puede que en El Madrigal se hayan dejado media liga. El Barcelona da la sensación que es como una vela que se va apagando... Está perdiendo el buen gusto.
La impaciencia, la precipitación, cierto desorden táctico y, por qué no decirlo, el miedo a ser derrocado tras años de gobierno autoritario, están minando su moral. Sólo en ese contexto se entienden palabras como las de Messi, calificando a los árbitros de “soberbios”. Caramba, sólo cuando pierden puntos se acuerdan de los árbitros.
No voy a caer en la trampa de decir que la liga ya es del Real Madrid cuando queda por jugarse toda una segunda vuelta pero con los siete puntos de ventaja, se me antoja que esta liga solo la puede perder el Madrid. Si tenemos en cuenta los números que está logrando, que son de récord, es difícil que se le pueda escapar. La liga que está haciendo es para enmarcar.
En el partido frente al Zaragoza, a pesar de comenzar perdiendo nunca perdió la calma. Sin sus mejores galas, ganó con justicia a un deprimido Zaragoza. Jugó con firmeza y encontró el lógico premio de tres puntos que le permite mantener al mejor Barça de la historia aun más lejos de lo que estaba, a siete puntos.
Ahora, los manipuladores de turno y los enemigos de Mourinho, a esos que les cae mal el portugués por ser antipático y prepotente, se inventarán o tratarán de sacar trapos sucios del vestuario blanco para intentar desestabilizar, sin argumentos de peso. No duden, que habrá campaña, alimentada desde Barcelona y secundada por algunos medios de comunicación de Madrid, como el diario Marca, por el mero hecho de no darle entrevistas en exclusiva y alguna que otra primicia.
De Barcelona emanan todas las virtudes y del Bernabéu sólo sale suciedad y malos modos. Que Xavi se equivoca cuando le sorprenden en un off the record diciendo que el Madrid no sabe perder y que Lass es un animal, pues nada, se le justifica y en algunos casos hasta se silencia la noticia. Si eso mismo lo llega a decir Mourinho o cualquier otro jugador blanco, se arma la de Dios en Cristo.
Del partido ante los maños, parten varias lecturas. Özil y Kaká pueden jugar juntos, y más ante rivales tan livianos como el Zaragoza. De hecho, el alemán ha encontrado un ritmo sostenido de regularidad. Aparece con más reiteración y su talento se derrama desde esa banda derecha en la que instala su rampa de lanzamiento. Cristiano sigue en plena fase de solidaridad defensiva y, lo que es más importante, no baja el pistón goleador y se siente querido por los suyos. Agradeció los aplausos y comprensión que encontró en esta ocasión en el Bernabéu.
Los tres puntos frente al Zaragoza fueron importantes, y más dos horas después del gran tropezón del Barcelona en Villarreal donde puede que se haya dejado la liga.
¿Ha perdido la liga el Barcelona? No, pero está a punto por la mala impresión que está dando. En mitad del campeonato se ve a un equipo cansado.
Soy de los que mantengo que Guardiola es un gran entrenador, pero también digo que se ha magnificado en exceso su figura. Se ha magnificado su talento. Cuando Messi pisa suelo firme y demuestra que es humano, que se cansa como todos; cuando a Xavi los años le empiezan a pesar y encima no puede contar con Iniesta, entonces es cuando el gran Guardiola se vuelve terrenal y se demuestra que por encima de todo, tuvo la suerte de heredar un extraordinario equipo que le ha hecho subir a la máxima escala como entrenador.
Al comienzo de esta segunda vuelta ya ha perdido los mismos puntos que perdió en toda la temporada la liga anterior. Es un síntoma de que Guardiola se cree que es perfecto cuando no lo es ni mucho menos. Ni reconoce que tiene una plantilla absolutamente desproporcionada. Tiene pocos defensas, pocos delanteros. Es normal, porque ama a los fabricantes de sueños en el centro del campo. Es lógico que sólo ame a los centrocampistas, que es donde él jugaba. La plantilla tan corta que ha fabricado le va a costar caro al este Barcelona que se está agotando.
El Real Madrid con una plantilla más completa va a ser el gran beneficiado. La liga cada vez es más blanca.
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Alfonso Celemín