El presidente ruso, Vladimir Putin, ha anunciado el despliegue de tropas en el flanco occidental en respuesta a la expansión de la OTAN en el este y la posible implicación de Suecia y Finlandia en la Alianza. Durante su discurso ante la Asamblea Federal rusa, Putin advirtió sobre «consecuencias trágicas» en caso de que la OTAN envíe efectivos a Ucrania, siguiendo la sugerencia del presidente francés, Emmanuel Macron, insinuando que Rusia también tiene capacidad para atacar territorio europeo.
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Putin destacó la necesidad de restablecer los distritos militares de las provincias de Moscú y Leningrado como medida «necesaria» ante los últimos avances en el marco de la invasión. En referencia a los planes de la OTAN de enviar contingentes militares a Ucrania, Putin recordó el destino de quienes han enviado tropas contra Rusia en el pasado, advirtiendo que las consecuencias para los posibles intervinientes serían «mucho más trágicas» ahora.
Por otro lado, la UE rechaza las amenazas de Putin y las atribuye a su propia campaña electoral, condenando enérgicamente dichas amenazas del presidente ruso, y calificándolas de «absolutamente inaceptables» e «inapropiadas», estas declaraciones deben entenderse en el contexto de las próximas elecciones en Rusia y los esfuerzos de Putin por lograr la reelección.