Barcelona, 18 jun (EFE).- La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, entiende que la decisión de volver a colgar un lazo amarillo en la fachada del ayuntamiento no debería deteriorar su relación con el PSC, y cree que, para que «salgan cuanto antes» los que considera «presos políticos», «necesitamos que el Partido Socialista sea un aliado».
En una entrevista en RAC1 y preguntada por la oposición del PSC -con quien debe negociar el futuro gobierno municipal- a colgar de nuevo una pancarta con el lazo amarillo, retirada en su momento por orden de la Junta Electoral, Colau ha advertido que «en este tema teníamos claro que cada uno tiene su posición», que ya se expresaba en el acuerdo del pasado mandato.
En este asunto, «en el pleno cada uno actúa como grupo municipal, y no como gobierno», ha subrayado Colau, que ha dicho que «la unidad de acción del gobierno se basaba en temas de ciudad» y que al inicio de este mandato «también lo hemos planteado como una cuestión de grupos y por eso ha sido un acuerdo de la Junta de Portavoces».
«Creo que para desjudicializar la política y para que la gente que está injustamente en la prisión salga cuanto antes mejor, necesitamos -ha dicho- que el Partido Socialista sea un aliado» y ha añadido que «esto pasa por el Estado, y evidentemente con el PP y Cs no lo haremos», ha subrayado Ada Colau.
«Lo del lazo nosotros no lo hacemos para atacar o para diferenciarnos del Partido Socialista, sino como expresión de que, si antes ya era excepcional que haya presos políticos y que era lógico que se expresase de forma excepcional en la fachada, si ahora un concejal de pleno derecho de nuestra corporación, Quim Forn, es uno de estos presos políticos, pensamos que todavía tenemos más motivo para poner el lazo». EFE