Luis Figo y Royston Drenthe no jugaron juntos nunca en el Real Madrid. El portugués salió del club blanco en 2005 y el holandés no llegó a la Liga española hasta 2007. Por eso, nadie hubiese previsto que los dos pudieran protagonizar juntos las crónicas de sucesos en una misma semana, aunque los dos lo hacen por incidentes diferentes.
El fichaje que aupó a Florentino Pérez a la presidencia del Real Madrid se encuentra estos días en Berlín, puesto que es uno de los embajadores de la UEFA en la final de la Champions. Sin embargo, su presencia al lado de una afición que dejó tirada a cambio de 10.000 millones de pesetas ha creado una gran polémica estos días.
El legendario ‘7’ iba a volver a vestir de azulgrana en un partido de veteranos de la Juventus y del Barcelona, pero el club pidió a la UEFA que le retirará del evento por la controversia que se había creado. Figo finalmente no tuvo que jugar, pero la imagen del morbo dejó paso a una escena mucho más dramática.
Según el diario Sport, Figo habría pegado a un aficionado culé en una discoteca de la capital alemana, en la madrugada del viernes al sábado. El fan barcelonista se acercó a los límites de reservado luciendo un polo del Barça y le pidió una foto al luso. El hombre de Olot de 29 años se besó el escudo. Eso hizo que la expresión del exfutbolista que se retiró de la lucha por la presidencia de la FIFA en el último suspiro cambiase radicalmente. Figo le tiró el cubata que llevaba en la mano por encima del polo.
Después, la discusión produjo que Figo se fuese a por una botella, pero los amigos del exfutbolista se percataron del incidente y fueron a sujetarle. Sin embargo, Luis consiguió pegarle un puñetazo, con la mano contraria a la que sostenía la botella, e hizo que las gafas del seguidor azulgrana cayeran al suelo. Finalmente, Figo se dedicó a lanzarle besos al supuesto agredido y al resto de sus amigos desde la distancia.
Asimismo, Drenthe también pasó una noche muy tensa, aunque en este caso la viviera en Madrid. El holandés aprovechó sus vacaciones para disfrutar de la noche madridista en la sala Opium, propiedad del directivo del Barcelona Javier Bordas. El actual futbolista del Kayseri Erciyesspor de la Superliga Turca entró en una bronca espectacular que se produjo dentro de la discoteca.
Volaron sillas y mesas. Hubo varios heridos, entre ellos el jugador que llegó al Madrid con aires de estrella, aunque sus lesiones fueron leves. La discoteca tuvo que ser desalojada y la Policía tuvo que intervenir porque la seguridad privada no daba abasto. En cualquier caso, no hubo ningún detenido.
No obstante, hay que recordar que este no es el primer encuentro de Drenthe con los agentes españoles. El explosivo futbolista fue cazado a 160 kilómetros por hora y saltándose varios semáforos en Alicante y chocó contra un coche policial en sus primeros días en España porque no miró al girar cuando se lo indicó el GPS.