Estas Navidades parece que no van a ser las mejores para Kiko Rivera y es que el hijo de la tonadillera ha perdido a un miembro de su familia. Flamenca, su perrita, ha tenido que ser sacrificada porque tenía la enfermedad de leishmaniosis. Así lo ha informado él mismo en su cuenta de Instagram.
El DJ está desolado por esta perdida. Sus vacaciones empezaron bastante bien al juntar a sus dos hijos, Francisco y Ana, pero no acabarán de la misma manera.
Rivera anunciaba en las redes el miedo que tenía por el estado del can, que iría al veterinario y que esperaba que no fuera nada. Sus plegarias no han sido escuchadas.
“Pues sí chicos, Flamenca ya no está entre nosotros. La tristeza se ha apoderado de mí. mi perra, mi maravillosa perra tenía la enfermedad de la leishmaniosis en un estado muy avanzado que le afectaba a los riñones. Sin tener cura alguna. Ha sido muy duro mucho”. Era el pie de foto que acompañaba la imagen de su perrita.
Momentos después de esta declaración, acompañada del pésame de sus fans, Kiko subía el antes y después de Flamenca, un pastor alemán que le ha dejado pronto.
La perra era de su madre, Isabel Pantoja, por eso mismo el nombre, con lo que si Kiko se ha mostrado afectado, cómo se sentirá la tonadillera cuando vuelva a Cantora y no vea corretear por sus hectáreas a la perrita cuyo nombre le identifica. Un duro golpe para el DJ, que tendrá que intentar olvidar el dolor que siente con su otro perro, Yako, del que también ha subido alguna foto a las redes sociales.