Encuestas, querellas, menos españoles…

Día de resaca electoral y de anuncios de querellas. Día previo al aniversario de otra victoria electoral, la del PP, el pasado veinte de noviembre. Rajoy ha anunciado que dará un mitin en Barcelona; una conmemoración arriesgada. El presidente va a exhibir su poderío presidencial en la plaza más difícil y quiere convertir en activo electoral el duro año que llevamos. Un desafío interesante.

Puig es un conceller polémico y El Mundo le acusa de ser beneficiario de un potosí surgido del Palau

Mientras Mas y Puig han preparado sus querellas criminales por asuntos de honor y los ataques, infundados dicen, que cuestionan su horabilidad. El señor Puig es un conceller polémico y El Mundo le acusa de ser beneficiario de un potosí surgido del Palau. Los Mossos de Escuadra, acusados también por el mismo medio de la polémica de borrar pruebas, también se querellarán. Y ya van tres.

Las encuestas le vienen mal al promotor de la mayoría excepcional, esa fabulación política que ralla, como aquella mayoría natural que pedía Fraga, en lo antropológico. Arzalluz se refería al Rh, pero Mas es más dúctil y prudente. En vez de razonar su apuesta, envida más. En enero empezará el proceso, si las urnas dan una mayoría soberanista al Parlament.

Los candidatos a segundos, siguen compitiendo entre sí. Nada nuevo, todo repetido. Lo único interesante son las estadísticas que anuncian una caída de la población española que devolverá a nuestro país a los datos de 1971. ¿Habrán descontado ya a los catalanes?


Análisis Estrella