El juez Andreu

El juez Fernando Andreu ha ordenado la excarcelación de 12 detenidos en la 'operación Emperador', cuya prisión había declarado ilegal por la sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional como consecuencia de un error suyo. Se trata de los principales implicados en la operación que se llevó a cabo contra la mafia china.

Entre los excarcelados está el supuesto cabecilla de la trama, el tal Gao Ping, así como su esposa, Yang Lizhen, y el jefe de la supuesta célula dedicada a la extorsión, Li Haibo. Hasta aquí la noticia.

Andreu excarcela a los 12 detenidos de la operación Emperador

Y, claro, al margen del escándalo que supone que un famoso juez de la no menos famosa Audiencia Nacional cometa un error tan asombroso, la pregunta es ¿este tipo de errores se pagan o todo va a quedar a beneficio de inventario? Y lo digo porque, en este país, que un juez pague sus errores cuesta un potosí. Y, si el juez es de la Audiencia Nacional, para qué contar...

Y hablando de la Audiencia Nacional, creo que va siendo hora de empezar a plantearse su disolución. Porque esta jurisdicción especial nació para combatir a ETA, en la Transición preconstitucional, y todo parece indicar que ETA está en proceso de desaparición. Y si su disipación total aún no es posible, sí pienso que habría que adelgazarla. Y, en cualquier caso, reconocerle los servicios prestados a algunos de sus jueces y bajarle los humos a otros porque parece que 'descienden de la pata del Cid' y no hacen otra cosa que creerse el ombligo del mundo.

Este juez de la Audiencia Nacional es uno de los que se han creído redentores de la humanidad

Y para muestra bien vale un botón. El propio el juez don Fernando Andreu es un ejemplo de esa creencia. Porque este juez de la Audiencia Nacional es uno de los que se han creído redentores de la humanidad. De hecho se permitió el lujo, en base a 'la competencia' de la Justicia española para perseguir un delito de lesa humanidad por el mundo, de mantener contra la opinión de la fiscalía una querella contra siete militares israelíes, entre ellos el ex ministro de Defensa Benjamín Ben-Eliezer, por un ataque de Israel en la franja de Gaza, en 2002, en la que murieron 14 personas. Soñaba el ciego que veía y eran las ganas que tenía, dicen en mi pueblo.

Pero hay más, este juez se ha visto envuelto en otras decisiones curiosas y controvertidas. Como fue el caso, por poner otro ejemplo, de la liberación de los piratas kenianos 'por imperativo legal'. Y aún anda la fiscalía intentando averiguar cuál era ese imperativo legal... Y digo esto, porque cuando un juez anda con la cabeza creyéndose que es el gendarme del mundo, como hicieron otros de la propia Audiencia Nacional que ya no están, se puede esperar cualquier cosa.

Hay quien se pregunta, incluso, si habrá influido, en este error del juez, la tensión vivida entre Israel y Palestina de hace unas semanas que tuvo momentos de guerra abierta...

No lo creo. Y Dios me libre siquiera de pensarlo. Pero bueno sería que se nos explicasen los quiénes y los qués del error. Y, sobre todo, qué va a pasar ahora porque ese error, al menos, hay que considerarlo muy grave.

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