160.000 euros de imaginación

El Gobierno concederá permiso de residencia en España a extranjeros que adquieran una vivienda cuyo precio sea superior a 160.000 euros. Dicho de otra manera: de lo que se trata es de incentivar al extranjero a que compre una vivienda porque podrá vivir en ella cuanto quiera.

El Ejecutivo considera que no se puede poner un límite de precio más bajo, porque generaría una demanda masiva de permisos de residencia y la vivienda sería la excusa para conseguirlos. En cuanto a los destinatarios, la medida se dirige sobre todo a mercados como el ruso, el chino, el noruego, el estadounidense o el suizo. Y al de cualquier país, lógicamente, que no pertenezca a la UE.

Una medida, por cierto, que ya existe en muchos países del mundo y que, incluso, apuntó en su día el Olvidable ZP con aquella historia que se inventó de la 'Residencia temporal no lucrativa' para los ricos, por lo que no se entiende la ácida crítica de los socialistas e izquierda en general. Y más si se piensa que, en tiempos del Olvidable, se concedían permisos de residencia con la fecha de la tapa de un yogur o con un bono bus.

Una medida que ya existe en muchos países

Esta medida de Rajoy lo que hace es simplificar el tema: vender permisos de residencia en España a cambio de comprar viviendas en las que se pueda vivir el tiempo que se quiera. Aquí de lo que se trata es de intentar dar salida al gigantesco stock inmobiliario que tenemos y, de paso, reducir el coste del rescate estatal a la banca.

Hasta ahora, los compradores de vivienda en España sólo podían ser españoles, comunitarios y extracomunitarios con permiso de residencia. A partir de ahora, el mercado de la vivienda en España será mundial, ya que cualquier persona de cualquier nacionalidad podrá adquirir una residencia en nuestro país y vivir en ella.

Pero hay más, de lo que se trata, también, es de pasar del turismo temporal al turismo permanente. Algo que, por cierto, he defendido en esta columna varias veces porque nuestro objetivo tiene que ser convertirnos en la Florida de Europa.

Y es que aquí tenemos lo que muchos países no tienen. Incluso, seguridad jurídica. Porque aún hay muchos estados en el mundo en donde eso de la propiedad privada es manifiestamente mejorable.

Creo, por tanto, que la medida es parte de esa imaginación, que también llevo reivindicando cierto tiempo, y que hay que ir poniendo en todos los sectores para intentar salir de la crisis. Que eso es lo único que cuenta.

Es más, creo que hay que seguir abundando en medidas parecidas. Porque, en Estados Unidos, por ejemplo, es posible obtener el permiso de residencia invirtiendo entre 500.000 y un millón de dólares en la creación de una empresa con al menos 10 trabajadores.

Y tacita a tacita...

La Avispa-Estrella Digital

Estrella Digital respeta y promueve la libertad de prensa y de expresión. Las opiniones de los columnistas son libres y propias y no tienen que ser necesariamente compartidas por la línea editorial del periódico.

La sonrisa de la avispa