Se confirmó lo que la larga lista de pajilleros y pajilleras de este país esperaba con ansiedad. ¡Cristina Pedroche volverá a dar las campanadas en Antena 3! Bet 365 y demás casas de apuestas deportivas que nos inundan en estos días, sacando a los españoles el mismo dinero o más que los bingos sacaban a los ludópatas de la transición, deberían aprovechar la noticia para valorar las incontables apuestas que se empiezan a entrecruzar sobre cómo será su vestido.
¡A la tercera, va la vencida!. Ese es el menos el deseo del populacho, que después de dos años de transparencias, que dejaban volar la imaginación hasta el infinito y más allá, como diría el incompetente Buzz Lightyear de 'Toy Story', creen que ahora si toca, que la presentadora saldrá completamente desnuda.
Hay que recordar que la Pedroche debutó en esto de las uvas, y no precisamente como chica Freixenet, en 2014, cuando logró que Frank Blanco fuera el primer hombre invisible español, ya que nadie deparó en él en cuanto apareció la colaboradora de Zapeando con su vestido negro transparente, dejando entrever sus braguitas a juego. El resultado fue que La Sexta dobló los datos del año anterior, con 1.395.000 espectadores y un 9,7% de cuota de pantalla.
Al año siguiente la chica decidió quitarse las bragas y demostrar cómo se puede salir sin ropa interior en televisión y que no pase nada. Bueno, algo sí pasó, porque la retransmisión de Antena 3 fue seguida por 2.242.000 espectadores. Con esa cifra, y con un 16,4% de cuota, la cadena arrebató a Telecinco el segundo puesto en la noche. El segundo hombre invisible de la historia de nuestro país fue ese día Carlos Sobera.
Como a la chica no le queda ya nada que quitarse, salvo el vestido, ni insinuar, porque todo ha quedado casi al descubierto, son muchos los que, dada además la afición de la chica a posar sin ropa en las redes sociales, apostarían hasta su vivienda, si les dejara su parienta o pariente, a que esta vez sí, que esta vez saldrá como Dios la trajo al mundo, para algarabía de la cúpula de Antena 3, que vería cómo se hacía realidad el sueño de desbancar a TVE en la única noche en la que el personal no da la espalda a la pública.
A favor del sptriptease más esperado estaría además que esta vez la chica no ocuparía tanto espacio en pantalla, ya que su acompañante no es otro que el fornido Chicote, que necesita que el plano se abra para entrar al completo en pantalla. Lo malo es que a lo mejor el chef le encarga una chaqueta transparente y con tres lunares de esos que tanto le gustan a él. Dos para que tapen sus pezones y un tercero para que no se vea su 'cosita', para no enemistarse con su compañero de profesión David Muñoz, que no parece que sea de los que le pone que su chica se luzca desnuda delante de extraños.
Mal se tendrá que dar la noche, de una forma o de otra, para que Antena 3 no mejorase sus registros de audiencia esa noche. Sólo lo evitaría el que a la Pedroche le diera un ataque de cordura y decidiese salir con un vestido Anne Igartiburu, recatado. De lo contrario, hasta Ramontxu, si es que TVE volviera a apostar por él y su capa, saltaría de balcón para contemplar in situ a la que fuera presentadora de Pekín Express. De esta forma, además, se convertiría en el cuarto hombre invisible del país.
La mosca