miércoles, abril 24, 2024
- Publicidad -

Ánimo y desánimo

No te pierdas...

En el PSOE, o al menos en la cúpula del PSOE, andan un poco más animadillos, sin pasarse, porque  los datos que les llegan indican que el partido gana algo de terreno, mientras que Podemos retrocede respecto a los sondeos de hace unos días. Son muy cautos cuando se les pregunta por sus pronósticos pero, unánimemente, afirman que van a tener más votos que el partido de Iglesias, aunque no se atreven a concretar más por los dichosos restos, los malditos restos de la ley D´Hont que tienen a todo el mundo en un sinvivir.

Cuentan alguna cosa más los inquilinos de Ferraz, o al menos algunos inquilinos de Ferraz. Por ejemplo, que  Pedro Sánchez ni se plantea dejar la secretaría general, entre otras razones porque está convencido de que el resultado no va a ser catastrófico. Cuentan también que han detectado una profunda y generalizada animadversión de sus votantes a Pablo Iglesias, pero a continuación se refieren a un futuro en el que ven a Sánchez  de presidente gracias al apoyo de Podemos, así que no se entiende nada. O al menos esta periodista no entiende nada. Y sí, en sus cálculos entra también que contarán con el apoyo incuestionable de Albert Rivera y Ciudadanos, lo que  provoca que esta periodista aún entienda menos la situación porque, por lo vivido hace dos meses, Podemos y Ciudadanos insisten en ser incompatibles entre sí, así que no se sabe cómo se puede producir el milagro de que Iglesias y Rivera jueguen a lo mismo, voten lo mismo y compartan el mismo proyecto.

Seguimos con gente con despacho en Ferraz. Por esos lares se afianza la idea de que Susana Díaz no dará finalmente el paso que lleva dos años con  amagar, optar a la secretaría general.  Parecía finalmente que sí, pero ahora parece que no. Se siente víctima del bajón en votos que vive el partido en esta era Sánchez, teme que ese bajón le afecte directamente en los resultados andaluces del 26-J y no quiere jugarse la presidencia andaluza  ejerciéndola al mismo tiempo que la secretaría general.

Eso dicen, pero en esto de la política los análisis y pronósticos cambian todos los días. Telefonazo por tanto al colega periodista de Sevilla para ver cómo respira: Susana se lo está pensando, responde. Este colega aseguraba hace apenas tres meses que “la Sultana”, como la llaman en Ferraz, tenía sus ojos puestos en Madrid, así que debe  ver la cosa regular cuando ahora  es Andalucía su prioridad. Ahora. Dentro de unas semanas, quién sabe. Es evidente que todo queda absolutamente supeditado al resultado electoral. En  Génova, en Ferraz, en Ventas y en la Plaza de España. Con más nervios en unas sedes que en otras, pero nervios en cualquier caso generalizados.

En Ciudadanos han tenido subidón por las  buenas críticas cosechadas por Rivera en el debate a cuatro, y el desánimo inicial de Sánchez porque las suyas no han sido buenas, se ha suplido  con el empeño del candidato socialista de pelear el último voto hasta la extenuación. Cuentan que está  físicamente cansado. Qué menos. No para, aunque en campaña es la situación habitual de los candidatos. Y no es por echarle flores, pero Rajoy debe compaginar su trabajo de presidente de gobierno en funciones con la campaña electoral, y sin embargo no pierde el tono de voz vibrante con el que intenta movilizar a los suyos.

Le quedan por delante varios actos electorales y un par de programas de televisión en los que va a aparecer un Rajoy impensable para la mayoría de la gente, para quienes no le conocen. El Rajoy con sentido del humor, divertido y mordaz. No se entiende  que su equipo lo haya mantenido encerrado durante tanto tiempo. Guste o no guste su proyecto, o  su gestión de gobierno,  en la distancia  corta gana mucho.

En el mundo periodístico se hacen todo tipo de especulaciones. Que si va a ofrecer su cabeza para  que el PP pueda seguir en el gobierno, que si Margallo está en esa operación, que si Rajoy prefiere a Ana Pastor… Eso, especulaciones. De momento, y mientras no se conozca el resultado electoral, en el PP nadie cuestiona a su presidente. Después … quién sabe.

Pilar Cernuda

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -