jueves, marzo 28, 2024
- Publicidad -

Pablo Iglesias se crece

No te pierdas...

Había que verlo allá en Vallecas, en su elemento, rodeado de su círculo más cercano –Bescansa, Errejón y Montero entre otros- y el círculo vallekano. Con k, que suena a más de Vallecas, más auténtico.

Hay que reconocer que en dominio del escenario no le gana nada, o habría que decir que no les gana nadie, los cuatro mosqueteros se mueven por igual – muy bien- en la fórmula que han encontrado para sustituir a los mítines electorales: una tertulia entre ellos. Se han fogueado precisamente en tertulias televisivas, así que saben perfectamente qué fibras sensibles tocar y cómo tocarlas. 

Los cuatro mosqueteros han encontrado la fórmula para sustituir a los mítines electorales, hacer una tertulia entre ellos

Iglesias no fue el más brillante,  aunque mejor no dar el nombre de quien le gana en soltura, no vaya a ser que le llegue la fulminación. Pero en cambio en egolatría Pablo Iglesias es campeón: además de advertir que antes o después iba a alcanzar el poder, dijo que Podemos había impuesto su estilo estético en la vida política, y que en el Congreso de los Diputados empezaron a aparecer camisas arremangadas, pelos largos y descorbatados en cuanto llegaron ellos.  No tiene abuela.

Sabe muy bien qué terreno pisa, y aunque aspira a ser un día primera fuerza, el objetivo de este 26-J es ser segunda, ganar al PSOE. Y de momento, para presentarse como el rival directo de Rajoy, el único que le puede hacer sombra, el líder de la oposición, piensa proponerle un debate a dos, como en su momento aceptó Rajoy con Pedro Sánchez.

El argumento para exigir ese debate es que en estos momentos representa la opción con más importante después del PP, porque a los votos de Podemos y acólitos hay que sumar el millón de IU.  Cosa distinta es que el PP, Rajoy, acepte ese debate y ese argumento, pero Iglesias va a insistir en la idea.

Sánchez, al fin, ha dejado atrás la cara larga y el gesto apesadumbrado, impropio de cualquier político que se precio y más aun en tiempos electorales, y se ha sacado de la manga una especie de gobierno en la sombra con aportaciones interesantes, entre las que destacan Ángel Gabilondo y Josep Borrell. Dos personas de peso, el peso que da la edad y la experiencia de gobierno, que falta hacía en un PSOE que apostaba por alevines cuando debería empeñarse en promocionar a los mejores sin tener en cuenta edad y presencia física.Y el aldabonazo lo ha dado con la juez Margarita Robles como número dos de la lista madrileña. No milita en el PSOE, pero nunca ha ocultado su colaboración con ese partido. Además de importantes cargos profesionales, fue  Secretaria de Estado de Interior en los años de plomo de ETA. Cargo en el que no se casó con nadie, sino que hizo lo que creía que debía hacer. Es un fichaje de altura, que sumado a la recuperación de Borrell y dar más protagonismo a Gabilondo,  va a colocar otra vez en el mapa a Pedro Sánchez, que falta le hacía.

Le espera sin embargo  una campaña dura, porque su continuidad en  la secretaría general sigue en el alero y lo sabe. O logra un resultado considerablemente mejor que el 20 de diciembre, o tiene muchas papeletas para ser relevado en el congreso del partido. Que no puede seguir aplazándose definitivamente porque algún día, en el algún momento, habrá gobierno, y entonces nada impedirá que los socialistas celebren su congreso.

Al del PP también le está llegando la hora. Tenía que haberse celebrado hace más de  un año, pero la excusa de las elecciones lo ha retrasado sin que nadie se atreva a poner el cascabel al gato. Pero se pondrá.

Dentro de unos días los populares tendrán ya alguna encuesta fiable, de momento se mueven en la nebulosa aunque las especulaciones están a la orden del día. Cuanto menos relevante sea el cargo al que se dirija uno, más saca pecho ante el que pregunta, dando a entender que está en los grandes secretos. Sin embargo, lo único cierto es que hasta ahora no saben nada, aunque esperan mejorar el resultado anterior. Esperan,  solo eso.

La campaña de Rajoy va a ser distinta a otras ocasiones. Mucha calle, que además le gusta;  y participación en programas de televisión, experiencia que inició en diciembre y que le gustó. Le veremos en situaciones hasta ahora desconocidas, cotidianas y hablando de lo divino y lo humano. ¿Y debate, habrá debate a cuatro? Casi seguro que sí, pero no lo decidirá hasta el último momento. ¿Dónde? Ah… Es lo que le gustaría saber a todo el mundo, pero ni los propios responsables de su campaña tienen idea, porque ni siquiera  han empezado a ver, a estudiar, a discutir, a analizar, las propuestas recibidas.

Pilar Cernuda

Artículo anterior
Artículo siguiente

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -