viernes, marzo 29, 2024
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Esparciendo semillas

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Hace un tiempo “corría” por internet un relato que me provocaba mucha ternura. Contaba la historia de una mujer que viajaba a diario en un autobús, atravesando un páramo semi desierto e iba lanzando algo por la ventana. El viajero del asiento contiguo, le preguntó un día que qué era lo que andaba tirando, a lo que ella respondió que se trataba de semillas. El hombre le mostraba su escepticismo y le hacía notar lo inútil que le parecía aquel gesto, al que calificaba como un auténtico desperdicio. La mujer, sin embargo, no parecía dejarse vencer por el desánimo, hasta que un día, sencillamente, ella desapareció. Al final de esta historia, se mostraba una hermosa imagen en la que el páramo anterior, aparecía convertido en un bello paisaje adornado con flores de todos los colores posibles.

En el trabajo gestual es muy importante una técnica depurada, precisa e impecable, pero también es necesaria una buena dramaturgia

Me ha venido a la memoria porque, en menos de una semana, casualidades felices, he podido ver dos espectáculos emparentados. La compañía alemana Familie Flöz, con su último montaje Garage D´Or y la compañía vasca Kulunka Teatro con Andre y Dorine. El teatro gestual, no es muy habitual en nuestra escena y , sin embargo, aquellos que se atreven con la apuesta del gesto, consiguen grandes éxitos. Compañías como Tricicle e Yllana, son dos buenos ejemplos. Con todos mis respetos para ambas compañías, que sin duda tienen el éxito que merecen, las propuestas de los Flöz y Kulunka, son otra cosa.

Tengo que reconocer que me ha costado acercarme a Andre y Dorine, porque mi admiración por los alemanes me cegaba. ¿Una copia?, me preguntaba injustamente. Ha querido la justicia poética que conozca el trabajo de los vascos, inmediatamente después de ver la función que menos me ha interesado de los Flöz. Porque en el trabajo gestual es muy importante una técnica depurada, precisa e impecable, pero también es necesaria una buena dramaturgia y ahí, me rindo claramente por este Andre y Dorine, capaz de poner  en pie a un público emocionado, que no dejaba marchar a los actores, con el aplauso más cálido y sincero que he escuchado en un teatro desde hace tiempo. ¿Hay algo más hermoso que ver florecer la semilla que algún día lanzó un buen maestro ?

La falta de importancia que se le otorga a lo artístico en España se refleja en su escasa relevancia en el sistema educativo

La posibilidad de aprendizaje es una de las características que más nos manifiesta, distingue y destaca como seres humanos. Por eso la educación es tan importante. Está bastante aceptado, el considerar que uno de los hechos diferenciales de los países, es la buena calidad de su sistema educativo. Los cambios en el nuestro, de hecho, están siendo uno de los asuntos más polémicos y contestados de las reformas del gobierno actual. Uno de los cambios que ha recibido más reproches, es la disminución en el currículo escolar de las asignaturas artísticas. Es obvio que el sistema educativo español, no considera prioritarias las artes: ni se considera importante favorecer el conocimiento y disfrute de las diferentes disciplinas artísticas, ni el propio desarrollo creativo de los niños y niñas como artistas. Lamento decir, que esta nueva ley abunda en un camino que ya viene siendo recorrido desde hace mucho tiempo. La falta de importancia que se le otorga a lo artístico en España se refleja en su escasa relevancia en el sistema educativo y, como cualquier círculo vicioso, el interés y conocimiento de las artes en la vida de los ciudadanos no va a aumentar, mientras no lo haga su presencia en el sistema educativo. Esto conlleva que el conocimiento y disfrute de las artes, seguirá reducido a las élites que lo trasmiten en casa, perdiendo así la oportunidad de universalización que ofrece la escuela y refleja la Constitución. En cualquier foro profesional en el que se reflexione acerca de los públicos para las artes, aparece la pregunta de por qué, después de casi cuarenta años de democracia, en los que se ha realizado un gran esfuerzo para crear una red de centros culturales, bibliotecas, teatros públicos, museos y centros de arte de todo tipo, no se ha conseguido que la ciudadanía en general, exija y participe activamente de su cultura. Lo más seguro es que la respuesta a esa pregunta, sea compleja y múltiple, pero sin duda tiene mucho que ver con esa falta de impregnación de lo artístico en el mundo educativo. El retraso histórico que padece España en este aspecto es brutal, pero solo con el compromiso y complicidad del mundo educativo, podremos avanzar para llegar a superar dicho retraso.

De momento, nos queda el reconocimiento a las muy honrosas excepciones, que trasmiten con pasión a sus alumnos, el amor a los libros, al teatro, a las artes plásticas, la danza, el cine…y confiar en que cada semilla lanzada, florecerá más pronto que tarde.

La dama boba

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