La pregunta, sí, la pregunta que hoy se hacen cientos de ahorradores a lo largo y ancho de la Unión Europea es si su dinero está seguro en los bancos. Y es que las decisiones adoptadas por la UE respecto a Chipre suponen una quiebra de la seguridad jurídica que se suponía que había en la Europa comunitaria.
El caso es que si usted con su trabajo y esfuerzo ha logrado ahorrar más de cien mil euros a lo largo de su vida, cualquier día de estos por obra y gracia de los mandamases de Bruselas se puede encontrar con que le diezmen los ahorros y además no le permitan ni siquiera sacarlos del banco.
¿Podemos creerles? Mi respuesta es que no
Sí, ya sé que desde Bruselas dicen que lo que han decidido para Chipre no se puede extrapolar al resto de los países de la Unión, pero ¿podemos creerles? Mi respuesta es que no. Los responsables de la UE, incluidos los Jefes de Gobierno de todos los países miembros, han traspasado una frontera peligrosa. A partir de ahora nadie puede estar seguro de que sus ahorros, su dinero, esté seguro en los bancos de la Unión Europea, así de simple, así de tremendo.
Convendrán conmigo que resulta insoportable para muchos ciudadanos que después de una vida de sacrificio y trabajo les quiten su dinero para pagar la deuda financiera provocada por la mala gestión de unos banqueros y unos políticos irresponsables. ¿Por qué tenemos que pagar los ciudadanos? ¿Por qué no pagan los responsables? Éstas son las preguntas que se hacen los ciudadanos de a pie hartos de pagar el coste de una crisis que no han provocado y cuyos responsables tienen nombres y apellidos.
Esa frontera que han traspasado los responsables de la UE puede tener consecuencias fatales, porque a partir de ahora los bancos europeos dejan de ser un lugar seguro para que los inversores y los ahorradores tengan su dinero.
Hay miles de ahorradores que no saben si guardar su dinero debajo del colchón
Otra pregunta que cabe hacer es por qué en Bruselas han tomado esta decisión, si es que son tan incompetentes que no han calibrado los efectos. Cuesta creerlo, pero no se me ocurre otra respuesta. Lo cierto es que en estos momentos hay miles de ahorradores que no saben si guardar su dinero debajo del colchón o en qué invertirlo, cualquier cosa antes de que un buen día la señora Merkel decida que hay que expoliar los ahorros y depósitos de otro país.
Se supone que los gobernantes están para resolver problemas, no para crearlos, pero a la vista está que los actuales responsables de la Unión están sembrando paro, miseria e inseguridad y no solo eso, con sus políticas están contribuyendo a la que el viejo y hermoso sueño de la Unión Europea se esté convirtiendo en una pesadilla.
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Julia Navarro