viernes, abril 19, 2024
- Publicidad -

Aguirre y el oportunismo

No te pierdas...

La simbólica propuesta de Aguirre choca en su improcedencia con su política de personal. ESTRELLA DIGITAL ha propuesto en diversas ocasiones una revisión del papel de la política con respecto a la situación de nuestro país en la crisis. Hemos defendido que la sociedad debe asumir costes pero que la política debe actuar de forma ejemplarizante, y en eso nos reafirmamos.

En los próximos días publicaremos en ESTRELLA DIGITAL una serie de reportajes sobre nuestras fuerzas armadas; durante su elaboración, los militares que han estado destinados en Afganistán nos han manifestado con naturalidad que a ellos, como al resto de los funcionarios de la Administración General del Estado, les han aplicado las disminuciones salariales acordadas por el gobierno.

Curioso que la aplicación ciega de las decisiones políticas no contemple excepciones obvias. Como obvio es que la política no debe ser una excepción a la hora de los ajustes. Pero de verdad, en serio y allí dónde se da de forma evidente y en primer lugar la no necesidad de sueldos opulentos para pelotas oficiales, propagandistas diversos y otros menesterosos, expertos de la supervivencia en los aledaños del poder

Aguirre propone la disminución de diputados, sin más ni más. Es obvio, también, que es un acto de oportunismo y de demagogia que nos deja a quienes defendemos con honestidad tal idea al pie de los caballos de una demagogia impresentable. Si la señora Aguirre desea reducir el peso de los costes de la política, debería empezar por los asesores, los directores generales y otros cargos de libre designación que abundan por la administración autonómica como el polen lo hace por nuestras calles.

Hace sólo unos meses proponía la creación de circunscripciones electorales en la región, con lo que eso supondría de incremento de los costes electorales, y luego un escándalo de pitada, el descubrimiento de un déficit escondido, la gestión de Bankia… ahora propone reducir el número de diputados – que no sería efectivo hasta 2015 y que depende de un acuerdo parlamentario- mientras elimina de forma inmediata una vacuna del plan de vacunación infantil para reducir costes. Impresentable: demagogia, ruido, folclore, desorden, lío, incapacidad y un sinfín de bufonadas que reducen la capacidad de la Comunidad de Madrid para mirar al futuro.

Si hay que reducir el número de diputados, bienvenido sea, hágase por consenso y como colofón a una reducción previa de decenas de cargos innecesarios, prebendas injustificables, dobles sueldos y otras arbitrariedades y lujos que rodean ostensiblemente a Aguirre y su entorno más inmediato que, liberado de tanta carga de acompañantes costosos e inservibles, podría destinar más esfuerzo personal a resolver nuestras dudas sobre sus actuaciones desde el poder.

Todo ello antes que esperar a 2015 o suprimir una vacuna infantil, que no deja de ser un oprobio que define su singular negación para representar dignamente a los madrileños. Rajoy debería actuar de inmediato, porque pronto será tarde y la sucesión de escándalos terminará en un inevitable deterioro social, cívico y desde luego que nadie se engañe, también electoral.

Editorial Estrella

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -