El Real Madrid salió vivo de Vallecas y de paso con media Liga en el bolsillo. El equipo de Mourinho consiguió excesivo premio por lo poco que hizo. Una genialidad de Cristiano Ronaldo, marcando de espectacular taconazo el único gol del partido, salvó a su equipo que sumó tres puntos que le encaminan sin remisión hacia el título de Liga.
Cristiano Ronaldo fue el único que se salvó del peor Madrid que he visto en toda la temporada. El portugués se elevó por encima de la mediocridad de su equipo, coronando el partido con un detalle digno de una estrella del fútbol.
El Rayo Vallecano no mereció perder y hasta con un poco de suerte hasta pudo lograr los tres puntos. El equipo del magnifico Sandoval, nunca defrauda. Qué digo defraudar, está dando grandes alegrías a la singular afición de la popular barriada de Vallecas que se vistió de gala en tarde dominical, saboreando todavía el café.
El Madrid sabía de antemano que el partido contra el Rayo era uno de los más peligrosos que le quedan fuera del Bernabéu. Mourinho, lo advirtió en las vísperas y se confirmó después. El popular rayito, se quitó de encima los posibles complejos y miró cara a cara al Real Madrid. Apretó sin tregua, peleó el balón y se las hizo pasar canutas a su rival que vivió desorientado toda la tarde. Sólo Cristiano vio la luz.
El Rayo petrificó al poderoso, le obligó a un partido de balones divididos, y le puso más nervio, juego y energía. Pero el pobre no tuvo puntería y perdonó al rico. Mereció el Rayo dar la vuelta al marcador y gozó de tres ocasiones clarísimas. Michu, en una pifia de Ramos en una actuación negada, erró por alto la primera. También el lateral Casado empalmó desde 30 metros un balón tal y como le venía, todo un misil, que obligó a Casillas a realizar una de esas paradas de fotos de carteles antiguos. Despejó de forma espectacular un balón que se colaba por la mismísima escuadra izquierda de su portería. Armenteros, en otro corner, terminó por fallar lo inexplicable. Ahí se le escapó al equipo de Sandoval la oportunidad de al menos empatar.
También el Real Madrid perdonó en otro par de ocasiones, una de Callejón que sustituyó a un desdibujado Kaká; y otra de Cristiano Ronaldo.
No nos extraña, que al finalizar el partido los blancos que esta vez vistieron de rojo, celebrasen el triunfo con gran alegría porque, sin duda, han dado un gran paso hacia el título de Liga. Creo sinceramente, que en Vallecas, el Madrid acaba de ganar la Liga.
El partido contra el Rayo, por las dificultades del propio rival, el campo tan pequeño y por el mal estado del césped, era de esos encuentros trampas que te dan y te quitan ligas. Con los tres puntos que el Madrid ha sumado es complicado que esta Liga se le vaya a escapar.
En este tipo de escenarios es donde se le escaparon títulos en años anteriores. No hay que ir muy lejos, la temporada pasada con los puntos que perdió en Almería Pamplona, y Riazor se le escapó el campeonato.
Ahora, el Madrid sabe salir vivo en situaciones extremas. El Rayo mereció puntuar y fue lógico el enfado de Mourinho con sus jugadores que estuvieron muy espesos, especialmente en la presión arriba y en las situaciones a balón parado. Pero, la realidad es que supo sufrir y ya colecciona 19 triunfos en 20 partidos consecutivos. El futuro campeón de liga va camino de récord. Todo un lujo, como el taconazo de Cristiano Ronaldo que va camino de convertirse en un jugador de leyenda en la historia del Real Madrid. Mal que pese a muchos, Cristiano es el mejor goleador del mundo y está al mismo nivel que Messi, quien con otra genialidad salvó a un pobre Barcelona en el Calderón. Lo mismo hizo Cristiano que con un taconazo de oro salvó a un mal Real Madrid que nunca se sintió cómodo ante el ardor guerrero de un Rayo que dejado muy alto el pabellón.
El que ha estado muy mal es el colegiado Fernández Borbalán. Perdonó una amarilla a Pepe al principio del partido y creo que Ramos no comete penalti en el codazo a Diego Costa. El andaluz, de espaldas, se cubre y el brasileño en una embestida contacta con su brazo y exagera la caída al más puro estilo Alves. Se perdonaron cartulinas a Movilla y al propio Costa, y fue injusta la roja a Michu al final del partido. Fue un arbitraje muy malo, e imaginamos que el entendido Luis Racionero desde su púlpito culé, volverá a la carga para cantar los favores de los árbitros al Madrid. Claro, que después de lo que se vio en el Calderón lo mejor será que los azulgranas se callen. Los dos grandes de nuestro fútbol, no tienen motivos de queja.
Lo mejor del partido para el equipo de Mourinho fue el resultado. Suma tres puntos en uno de esos campos donde se ganan ligas. Y creo que el Real Madrid con este triunfo acaba de ganar el campeonato.
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Alfonso Celemín