jueves, marzo 28, 2024
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Felipe González

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Muy desesperado debe estar Rubalcaba cuando saca en sus mítines a Felipe González como telonero. Muy mal debe estar el PSOE cuando tiene que recurrir a Felipe González para que le haga la campaña electoral. Muy abatidos deben estar los socialistas españoles para que no haya ninguna figura emergente que pueda concitar su voto en estas elecciones.

¿Qué busca, entonces, el PSOE sacando a este tiranosaurio del Periodo Cretácico? No lo sé. Pero es incomprensible. No hay explicación razonable más allá de la desesperación.

Porque, aquí, lo único que sabe es que la gestión de Felipe González como Presidente del Gobierno es recordada por la corrupción generalizada de todas las Instituciones del Estado. Incluido, el terrorismo de Estado con el GAL.

Por la creación de la burbuja inmobiliaria (Decreto Boyer de 1985).

Por la destrucción del sistema educativo español con la LOGSE.

Por los tres millones de parados (20%), el aumento de la deuda (casi la triplicó) y la ampliación del déficit.

Por los ataques a la libertad de expresión (cierre de Antena3 Radio, eliminación del programa «La Clave», ataques a directores de periódicos etc.).

Por la politización de los Tribunales, del CGPJ (L.O.P.J. de 1985) ¿Recuerdan aquello de Guerra diciendo Montesquieu ha muerto? etc.

Por la expropiación de RUMASA para repartirla entre sus amigos.

Por el fomento de la España del pelotazo, según Solchaga, y la creación de una población parasitaria como el PER.

Y por el enchufismo en las Administraciones Públicas, el acceso a la judicatura por el 4º turno, etc…

Eso sin contar con el caso Roldán, el caso Rubio, el caso Filesa, Malesa, y Time Export, el caso Valverde, el caso BOE, Caso Fondos Reservados, caso Juan Guerra… Y no quiero alargarme más. Porque también nos metió en la Primera Guerra de Irak.

En fin, que Felipe González no es, precisamente, una joya digna de exhibirse. No entiendo, entonces, por qué lo lucen ahora junto a Rubalcaba ni qué buscan con ello.

A veces, pienso que los nuevos socialistas, esos que están avergonzados de la gestión de Zapatero y consideraban a González un tipo a olvidar para siempre, están encantados con la reaparición de Felipe porque, con ella, la debacle electoral puede ser tan grande que, es posible, que haya que refundar el partido después de haberlos echado a todos.

Pinocchio

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