El exministro de Transportes y destacado dirigente socialista, José Luis Ábalos, ha expresado su malestar ante la auditoría presentada por el Ministerio de Transportes en relación al llamado ‘caso Koldo’, en el cual se le imputa haber ordenado la duplicación de la compra de mascarillas a través de la trama liderada por su exasesor Koldo García Izaguirre. Ábalos ha manifestado su descontento con la gestión del PSOE, insinuando que podría dejar de apoyar a su antiguo partido en el Congreso de los Diputados.
El exministro, quien ahora forma parte del Grupo Mixto tras ser apartado por la dirección del PSOE debido a la implicación de su asesor en el caso, criticó duramente el informe de auditoría que presentó Óscar Puente, actual ministro de Transportes, en el Senado. Ábalos calificó el informe como «improcedente», y lo comparó con un «tribunal de honor», lo cual, según él, está prohibido por la Constitución. En declaraciones a Cuatro, Ábalos manifestó su sorpresa y decepción por la actitud de su antiguo partido, sugiriendo que el informe debió haber sido encargado por la autoridad judicial o, al menos, haber sido comunicado a la Audiencia Nacional que investiga el caso.
Además, en una entrevista reciente con El Español, Ábalos fue más allá al sugerir que podría dejar de votar con el PSOE en el Congreso, lo que podría implicar un distanciamiento significativo con su antiguo partido. «El Gobierno no podrá dar por seguro mi apoyo«, advirtió el exministro, añadiendo que decidirá cada tema «en conciencia» y que «iremos viendo cada caso».
A pesar de su distanciamiento, Ábalos ha subrayado que su compromiso con el programa electoral del PSOE sigue en pie, y ha descartado que su cambio de postura implique una represalia hacia el partido que lo llevó al poder. Sin embargo, su posible cambio de postura en votaciones futuras podría afectar la estabilidad parlamentaria del gobierno.
Este cambio de posición por parte de Ábalos marca un punto de inflexión en su relación con el PSOE, y podría tener consecuencias significativas en el balance de fuerzas dentro del Congreso, especialmente en temas clave como el concierto económico para Cataluña, que Ábalos ha mencionado como un área donde podría desvincularse de las directrices del PSOE.