En una rueda de prensa, la consejera portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, ha indicado que ésta es una de las dos residencias de mayores que han sido intervenidas por la Junta de Comunidades y ha recordado que la otra residencia intervenida ha sido Elder de Tomelloso (Ciudad Real), donde fallecieron una quincena de ancianos por coronavirus.
En cuanto a la residencia Cervantes, de Villamayor de Santiago, de titularidad privada, fuentes de la Consejería de Sanidad han precisado que se cerró a primeros de abril y aún sigue cerrada.
Fernández ha señalado, asimismo, que el cierre se decidió porque las condiciones eran «muy poco aceptables» y los mayores fueron trasladados a otras residencias.
Ademas, ha dicho que más de 500 test de COVID-19 se hacen a diario en las residencias de mayores de Castilla-La Mancha, en las que hasta el momento han fallecido 621 personas por coronavirus, de las cerca de 30.000 que viven en residencias.
Ha destacado que en la región se han hecho en total hasta ayer más de 44.000 test de coronavirus, de los que entre el 35 y el 40 % da positivo, lo que da la cifra de 14.680 casos positivos en la región.
Ha valorado que es un número alto pues supone una tasa de 22.000 test por millón de habitantes y ha destacado la importancia de esta medida que ayuda a proteger la salud de las personas.
El plan para residencias de la Junta, según ha explicado Fernández, establece que equipos médicos y de enfermería analizan a diario la situación en las residencias, de manera que los pacientes leves son atendidos en los centros y los graves son trasladados a los hospitales.
Asimismo, desde la bolsa de trabajo de la Consejería de Bienestar Social se presta apoyo logístico a las residencias privadas que necesitan personal.
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