El contrato entre el Ministerio para la Transición Ecológica e Ifema superó los 48 millones de euros, cantidad que incluía la cesión temporal de espacios, la adecuación de las infraestructuras y la prestación del conjunto de servicios necesarios para organizar y celebrar la cumbre, de acuerdo con la referencia del Consejo de Ministros.
El segundo contrato más elevado, aunque con un valor muy por debajo del primero, fue el suscrito con la Corporación RTVE para la cobertura y retransmisión internacional en régimen de «pool» de los actos de la cumbre, así como la adecuación del espacio de trabajo para la prensa internacional, que precisó una inversión de poco más de 850.000 euros.
El acceso gratuito de los participantes en la COP25 al transporte público madrileño superó los 160.000 euros y la atención protocolaria para jefes de Estado y representantes de las delegaciones de los países miembros de la ONU no llegó a los 38.000, según la referencia.
Además, la programación de actividades y acciones de divulgación vinculadas a la cumbre costó casi 27.000 euros, mientras que la contratación de servicios de asesoría y traducción requirió poco más de 21.000 y los contratos para definir, implantar y evaluar los sistemas de gestión, sostenibilidad ambiental y certificación, algo menos de 17.000 euros.
A pesar de ello, la de Madrid puede presumir de haber sido la segunda cumbre del clima más económica de los últimos 9 años, sólo por detrás de la celebrada en Varsovia (Polonia) en 2013, «cuya organización supuso 35 millones de euros».
La referencia del Gobierno en funciones explica que «las magnitudes» de una convocatoria de este tipo, así como la proximidad de su celebración «con apenas seis semanas de preparación», hizo necesario adoptar «de manera inmediata» las medidas necesarias para garantizar el éxito de la cita, incluyendo estos contratos públicos para las actuaciones que «no pudieron ser atendidas con los recursos propios de la Administración General del Estado».
A falta del cierre definitivo de las cuentas, el monto total se sitúa en torno a los 50 millones de euros, aunque el texto añade que «habría que añadir los costes derivados del acuerdo de sede con la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, que suman 3,1 millones de euros» más.
La referencia también recuerda que «sin perjuicio del retorno económico» de la cumbre para España y en especial para la Comunidad de Madrid y para la propia capital, la COP25 contó con el apoyo económico de varias entidades patrocinadoras cuyas aportaciones cubrieron «en torno al 20 % de los costes previstos».
Además, está en curso una iniciativa para conseguir más apoyo financiero a través de los Fondos Europeos.
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