Francia consiguió su objetivo de ser primera de grupo al empatar a nada frente a Suiza. Los galos se enfrentarán a un tercero en octavos de final, mientras que los helvéticos también se dan por satisfechos, puesto que jugarán contra el segundo del grupo C, que si las cosas van según lo previsto será Polonia, una selección de su nivel.
No obstante, los seguidores de 'la Roja' estará pendientes de lo que hagan los suizos, puesto que si España cierra la primera fase como primera, se podría cruzar con ellos en cuartos de final. La selección de Petkovic fue capaz de superar a Francia en la posesión, pero no consiguió crear ni una sola ocasión clara en todo el partido.
Por su parte, Francia solo inquietó a un dubitativo Sommer con dos disparos lejanos de Pogba y Payet que chocaron contra el travesaño. El centrocampista de la Juventus estuvo algo atropellado en la primera mitad y desapareció en la segunda, pero el futbolista del West Ham volvió a revolucionar el juego de su equipo cuando salió desde el banquillo. Pese a todo, lo más destacado de la noche fueron las camisetas rotas de los suizos en cada agarrón. Las prendas Puma dejaron una triste imagen, puesto que se la tuvieron que cambiar más de media docena de jugadores, aunque el balón Adidas tampoco salió bien parado, ya que se partió por la mitad por un simple pisotón.
Deschamps introdujo varias rotaciones en el ataque y en el centro del campo, pero Francia dejó unas sensaciones muy parecidas a las de las otras dos primeras partes que lleva en este torneo. Su condición de anfitriona no le sirvió para asustar a Suiza desde el principio y el encuentro ya llegó al descanso con la posesión favorable a los helvéticos.
Los dos equipos no tuvieron necesidad de arriesgar
No hubo tantos en los primeros 45 minutos, aunque Francia dispuso de dos oportunidades claras por una de su rival. La primera la tuvo Suiza tras un saque de esquina en el que remató Schar, Pogba despejó fatal, pero Djourou fue incapaz de empujar el balón en la línea de gol, mientras que Lloris se le tiró literalmente encima.
Después apareció el mejor Pogba, que lo intentó con dos lanzamientos potentísimos desde la frontal. Sommer, que dio muy poca seguridad a los suyos en sus salidas, envió el primero a córner con una intervención llena de torpeza. El segundo disparo del futbolista pretendido por el Real Madrid se estrelló contra el larguero antes de llegar a los veinte minutos de juego, pero a partir de ahí los galos bajaron muchísimo el ritmo y no hubo ocasiones claras antes del descanso. Pogba tuvo muchísimos altibajos y en muchas fases destacó por sus imprecisiones, mientras que se echaba en falta a un jugador que aportase algo de calma en el centro del campo.
Además, Suiza mandó en la fase inicial del segundo acto, aunque Griezmann tuvo la primera ocasión clara tras la reanudación. El delantero del Atlético hizo una buena pared con Gignan en una diagonal rapidísima, pero su disparo centrado encontró la mano de Sommer.
No obstante, Francia volvió a coger el pulso del partido en los últimos minutos, aunque daba la sensación de que los dos equipos se conformaban con el resultado. Sissoko dio una exhibición de fuerza en una jugada en la que se fue de todos por la banda y metió un gran centro al segundo palo. Payet remató con un ‘interiorazo’, pero el balón pegó otra vez contra el larguero. Finalmente, los dos equipos vieron que tenían el objetivo cumplido y no volvieron a inquietarse.
Felipe Poza