Conducción temeraria en La Rioja: lo graban, frena en seco y amenaza a testigos
Un joven de 26 años ha sido señalado por la Guardia Civil tras protagonizar una peligrosa escena al volante en la N-232. La agresividad y temeridad mostradas han encendido las alarmas sobre la seguridad vial en nuestras carreteras
La Guardia Civil ha informado sobre la investigación a un hombre de 26 años por un grave caso de conducción temeraria en la comunidad autónoma de La Rioja. El episodio ocurrió en la carretera N-232, dentro del término municipal de Alfaro, y fue presenciado —y grabado— por otros conductores, quienes alertaron inmediatamente a las autoridades.
Todo comenzó cuando un vehículo adelantó de forma brusca a otro, zigzagueando peligrosamente entre carriles e invadiendo incluso el sentido contrario. Lo más alarmante es que lo hizo ignorando una línea continua, lo que agrava la imprudencia.
Gestos obscenos y actitud provocadora
Según relatan los testigos, el conductor investigado no solo ejecutó maniobras peligrosas, sino que además gesticulaba con insultos, realizando "peinetas" mientras tenía sus manos fuera del volante. En un gesto aún más arriesgado, llegó a abrir la puerta del conductor mientras se aproximaban otros vehículos en sentido contrario.
La amenaza no quedó en gestos
Cuando el conductor se percató de que estaba siendo grabado, su actitud se tornó aún más hostil. Frenó en seco frente al coche de los testigos, descendió del vehículo y se aproximó con claras intenciones intimidatorias. Tal fue su agresividad, que llegó a golpear el retrovisor y la ventanilla del coche desde el que lo filmaban.
Los vídeos entregados a las autoridades por las víctimas muestran claramente el nivel de riesgo al que expuso a todos los usuarios de la vía. En las imágenes se observan múltiples infracciones al Reglamento General de Circulación, desde circular sin manos al volante hasta caminar por la calzada sin ninguna prenda reflectante.
Posibles consecuencias legales
Tras ser identificado por la Guardia Civil, el individuo ha sido investigado formalmente por un delito de conducción temeraria. Tal y como estipula el artículo 380 del Código Penal, este tipo de comportamientos pueden ser castigados con penas de prisión que oscilan entre seis meses y dos años. Además, conllevan la retirada del permiso de conducción por un periodo que puede ir de uno a seis años.
Este marco legal busca actuar con firmeza ante conductas que, como en este caso, ponen en serio riesgo la vida de otras personas. Las autoridades no solo buscan sancionar, sino también prevenir futuras situaciones similares mediante la ejemplaridad.
Gracias a la reacción de los testigos, que grabaron lo ocurrido y lo denunciaron de inmediato, se pudo dar inicio a la investigación de forma efectiva. Este tipo de colaboración ciudadana es vital para erradicar comportamientos peligrosos en las carreteras.
La Guardia Civil recuerda que cualquier persona que sea testigo de una situación similar puede contactar con ellos a través de los canales oficiales, como el teléfono 609 428 990 o el correo prensa@guardiacivil.org.