Frank Cuesta se retracta de su confesión y apunta a un guion impuesto

Frank Cuesta
Frank Cuesta denuncia chantajes, amenazas y manipulación: “Nos quieren destruir como familia”

Frank Cuesta ha reaparecido horas después de publicar un vídeo que ha puesto patas arriba las redes sociales. En la primera grabación, el conocido defensor de animales se declaraba mitómano, pedía disculpas a su excolaborador Chi, y confesaba no ser veterinario, no tener cáncer, ni haber rescatado animales. Sin embargo, en un nuevo y extenso directo, Cuesta cambia el tono, desmiente parte de lo dicho anteriormente y asegura que ese vídeo fue parte de un acuerdo para frenar lo que él describe como una campaña de acoso y derribo.

“El vídeo fue guionizado. Me mandaron un texto y el acuerdo era que, si lo publicaba, se detenía el acoso. Lo hice desesperado, tras un ataque de ansiedad de dos días, pero no sirvió de nada”, explicó.

“Nos están acosando desde hace meses”

Durante más de dos horas, Cuesta narró una secuencia de hechos que, según él, se remonta a agosto de 2024. Asegura que desde entonces se ha orquestado una operación para destruir su imagen pública y personal.

“Han filtrado audios, imágenes privadas, han contactado con mis hijos, han dicho que soy cocainómano, estafador, incluso insinuado cosas como zoofilia o abuso de menores. Esto ha sido una cacería”, denunció.

Cuesta sostiene que todo comenzó como una disputa personal, pero se ha transformado en un ataque que ha afectado profundamente a su familia. “Mi hijo ha tenido que venir de España. Mi hija está aterrorizada. Tenemos miedo real”, afirma con contundencia.

Una confesión matizada: “Sí tengo estudios de veterinaria, sí he rescatado animales”

El protagonista de Frank de la Jungla matizó también sus propias palabras del vídeo inicial. Asegura que sí tiene formación en veterinaria, que ha realizado varios cursos de herpetología y que podría ejercer en determinados países.

“He dicho muchas burradas y cometido muchos errores, pero tengo conocimientos y he trabajado toda mi vida con animales. El santuario sigue siendo un lugar donde los animales son felices”, subrayó.

También defendió que sí ha realizado rescates, aunque no en el sentido tradicional. “Rescatar no es solo quitar un animal de una jaula en una redada. Es ofrecerle una vida mejor. Aquí muchos animales han aprendido a ser animales otra vez”, explicó.

Chi y las amenazas: “Nunca imaginé que me traicionaría así”

Uno de los elementos más sensibles del conflicto es la figura de Chi, excolaborador y amigo cercano de Cuesta. En el primer vídeo, Frank le pedía disculpas. En el segundo, sin embargo, asegura que ese mensaje no tenía relación con él y que todo forma parte de un pacto impuesto bajo presión.

“Chi no tiene ni santuario, ni proyecto, ni nada. Lo único que tiene es odio. Dice que le maté una lora, pero nunca tuvo una. Todo ha sido una manipulación para destruirme”, sostiene Cuesta.

Afirma también que ha sido víctima de chantaje emocional y mediático. “Si no hacías lo que te pedían, decían que soltaban otra bomba. Esto ha sido una ejecución social orquestada”, afirmó, refiriéndose a streamers y youtubers que habrían participado en la difusión del escándalo.

“No soy perfecto, pero no soy un criminal”

Cuesta admite errores, exageraciones y fallos del pasado, pero niega categóricamente haber cometido delitos o maltratos. Se muestra dolido por las insinuaciones sobre su salud, familia, pareja y vida sexual.

“Nunca he matado un perro ni un gato. Nunca he abusado de nadie. Jamás he vendido un animal. Todo lo que he hecho ha sido por darles una vida mejor”, recalcó.

Anunció también que no hablará más del tema, aunque es consciente de que “vendrán más bombas”. “Mis hijos tienen miedo. Estamos encerrados en el santuario. Esto ha dejado de ser una polémica: es acoso real”, concluyó.

Este nuevo vídeo deja claro que la situación lejos de cerrarse, se complica. Frank Cuesta, entre contradicciones, matices y confesiones, parece haber entrado en una espiral mediática que aún no ha tocado fondo. La gran pregunta sigue siendo si este conflicto podrá resolverse o acabará por destruir lo que durante años fue uno de los proyectos de conservación animal más seguidos.