Condenados cuatro exdirectivos de Volkswagen por el escándalo de emisiones del 'dieselgate'

dieselgate Volkswagen/redes

El tribunal alemán impone penas de hasta cuatro años y medio de cárcel casi una década después del fraude de los motores diésel manipulados

El Tribunal Regional de Braunschweig, en Alemania, ha condenado este lunes a cuatro exdirectivos de Volkswagen por su implicación en el escándalo del 'dieselgate', uno de los mayores fraudes corporativos en la industria del automóvil. Las sentencias llegan casi una década después de destaparse la manipulación de millones de vehículos con un software diseñado para falsear las emisiones contaminantes.

Hasta cuatro años y medio de prisión

Entre los condenados figura Heinz-Jakob Neusser, exdirector de desarrollo de motores del grupo alemán, que ha recibido una pena de un año y tres meses de prisión en suspenso. Por su parte, Jens H., otro de los responsables clave, ha sido condenado a cuatro años y medio de prisión efectiva por su papel en la manipulación del software que afectó a más de dos millones de vehículos.

También han sido sentenciados Hanno J., con dos años y siete meses, y Thorsten D., con un año y diez meses de cárcel. Todos ellos habían negado los cargos durante el juicio, iniciado hace cuatro años.

Un escándalo que salpicó a 9 millones de coches

El tribunal considera probado que los condenados participaron en el diseño y aprobación de un sistema que alteraba los niveles reales de emisiones contaminantes durante las pruebas, con el objetivo de sortear las normativas medioambientales tanto en Europa como en Estados Unidos.

El escándalo del ‘dieselgate’ estalló en 2015, cuando las autoridades estadounidenses detectaron las irregularidades en motores diésel. Se estima que el fraude afectó inicialmente a más de 9 millones de vehículos, aunque durante el juicio el número se redujo a unos 4 millones, según el tribunal.

Daños millonarios y crisis de reputación

Volkswagen se vio obligada a pagar multas y compensaciones por valor de miles de millones de euros y sufrió una importante crisis reputacional a nivel mundial. Esta es la primera sentencia penal firme contra antiguos altos cargos de la empresa, y podría marcar un precedente judicial para otros procesos aún abiertos.