El acecho de la Justicia revive a los aspirantes a echar a Florentino Pérez del Real Madrid
Florentino Pérez se las ha ingeniado para conseguir que muchos socios madridistas consideren que es el único capacitado para ocupar el sillón presidencial. Sin embargo, su mandato en el Real Madrid no se caracteriza por la brillantez en el apartado deportivo. En sus doce años al frente del club blanco (a lo largo de dos etapas), el Madrid solo ha ganado cuatro ligas, dos Champions y dos Copas del Rey, mientras que el Barcelona ha vivido la época más exitosa de su historia.
El dirigente de ACS heredó un gran equipo de Lorenzo Sanz, pero después se dedicó a fichar a grandes estrellas que, con el tiempo, dejaron de funcionar como grupo. Sin embargo, su capacidad para el marketing y la experiencia con Ramón Calderón lo llevaron a convertirse en poco menos que en el amo del club.
En 2013, en una maniobra muy criticada, consiguió que los socios aprobaran unos estatutos por los que se garantizaba la ausencia de competencia en las futuras elecciones. Con las nuevas normas, las candidaturas debían de presentar el correspondiente aval (del 15% del presupuesto) de forma personal, sin el respaldo de los bancos. Además, el presidente cuyo mandato expirase no tendría la necesitad de aportar dicha garantía. Asimismo, las normas actuales exigen 20 años de antigüedad como socio para poder presentarse a las elecciones, cuando antes bastaba con acreditar 10 años.
A muchos socios y aficionados 'merengues' esa jugada de Florentino Pérez les recordó demasiado a las habituales maniobras de algunos presidentes de repúblicas bananeras, que durante sus mandatos reforman la Constitución del país a la medida de sus aspiraciones, para alejar cualquier posibilidad de cambio político y asegurarse el poder a perpetuidad.
Por todo eso, varios socios presentaron una demanda. Consideraban que los estatutos aprobados en asamblea vulneraban la Ley del Deporte y la Ley Orgánica del Derecho de Asociación. El proceso ha seguido adelante y se resolverá el día 25 de noviembre, cuando se hará pública la sentencia del caso. Si la Justicia tumba los estatutos, Florentino tendría que adelantar los comicios previstos para el 2017 y habría nuevas elecciones en la 'Casa Blanca' en el próximo mes de diciembre o en enero. Además, en esa fecha el abanico de posibles candidatos será muy amplio y la competencia estará garantizada. Alguno de los hombres mejor situados para sustituir al actual presidente son los siguientes:
Manolo Sanchís. El excentral es un auténtico emblema del madridismo. Tiene una gran antigüedad como socio del club y no tendría problemas para conseguir socios que reunieran el aval. Cuando colgó las botas se convirtió en un empresario de éxito y siempre fue muy crítico con la gestión de Florentino Pérez. Nunca ha escondido sus ganas de convertirse en presidente y tiene un proyecto muy meditado. Obtendría el apoyo de muchísimos socios, puesto que presentaría una candidatura con muchos exjugadores legendarios en el proyecto. Raúl podría ser su hombre fuerte.
Vicente Boluda. Llegó a ser presidente momentáneo, pero con los estatutos vigentes no se pudo presentar en 2013. Sería uno de los 320 españoles que cumplirían el actual criterio del aval, pero es socio sólo desde 1998 y los últimos estatutos le excluían de la lucha. Ha movido sus hilos para ganar apoyos entre los medios de comunicación, pero su famoso ‘chorreo’ le hizo perder credibilidad de cara a los socios.
Carlos Mendoza. Florentino le falta al respeto en todas las reuniones de compromisarios y ha conseguido que mucha gente piense que es un 'friki', pero tiene más peso del que parece. La asociación que preside, 'Valores del Madridismo,' busca democratizar el club y nació bajó el mecenazgo de Juan Miguel Villar Mir, que también podría presentarse, aunque ahora parece que está más interesado en mover sus hilos en la sombra.
Eugenio Martínez Bravo. El presidente de 'Plataforma Blanca' es el eterno aspirante, pero nunca ha conseguido reunir los avales. Este viejo trabajador de HSBC tiene un gran discurso, propio del mejor de los políticos, que convence a muchas de las personas que le escuchan. Pero necesita incluir en su candidatura a alguien con el poder económico necesario para respaldarle. Empezó a hacer oposición en la época de Calderón y continúo con Florentino, aunque tampoco tuvo problemas en reconocer los méritos de los dos presidentes cuando se produjeron.
La opción continuista. A sus 68 años, Florentino sabe que su etapa en el Real Madrid no debería alargarse mucho más. No tiene muchas ganas de echarse a un lado, aunque Eduardo Fernández de Blas y Borja Prado se han postulado como sus futuros sucesores. En cualquier caso, unas elecciones en mitad de temporada, sin derrotas de por medio que enfaden a los socios, podrían ser la ocasión perfecta para garantizar la continuidad del proyecto con otra cara visible. No obstante, es difícil que Florentino tome esta decisión, pues podría interpretarse que deja al club tirado a mitad de temporada, como ya hizo en 2006. Asimismo, Arturo Baldasano, el eterno perdedor en las últimas votaciones, ahora está del lado de la actual directiva, desde que Teka firmó un nuevo contrato de patrocinio con el club.