Se acabaron las ayudas del gobierno al transporte público a partir de julio

A partir de julio, utilizar el transporte público será más caro. Imagen: Pixabay
El Gobierno ha anunciado que las ayudas al transporte público cesarán a partir de julio. Esto se traducirá en un incremento de precios para millones de usuarios en España

Es una realidad: las ayudas del Gobierno al transporte público urbano, metropolitano e interurbano no se prorrogarán más allá del 30 de junio. Esto se traducirá en un incremento de los precios de los abonos y billetes para los consumidores. 

A partir del próximo 1 de julio, viajar en transporte público será más caro para millones de usuarios en España, después de que el Gobierno haya confirmado que las ayudas al transporte público vigentes desde 2022 no se vayan a prorrogar. 

La medida, que permitía bonificar al menos el 50 % del precio de abonos y billetes, desaparecerá a finales de junio, lo que ya ha provocado que varias comunidades autónomas anuncien subidas de precios.

Una de las primeras Comunidades Autónomas que ha confirmado esta subida de precios ha sido la Comunidad de Madrid: los descuentos aplicables en sus títulos de transporte pasarán del 60 % al 40 %. Mientras tanto, en Andalucía, por su parte, se mantendrán ayudas para jóvenes y menores, que seguirán disfrutando de gratuidad o descuentos del 50 %, aunque el resto de usuarios también notarán un encarecimiento, aunque algo menor.

La OCU muestra su preocupación y refuerza su compromiso por la movilidad sostenible

Desde la OCU se ha expresado preocupación por una medida que conllevará un incremento de los precios, y con ello, que los usuarios opten por otras alternativas como usar el coche o la moto. Precisamente se señala al transporte público como “uno de los pilares de una movilidad urbana sostenible además de la principal alternativa al coche”. 

El transporte público, medio de transporte más utilizado en Madrid y Barcelona en 2025. Imagen: UCO

Con esto, la OCU subraya lo siguiente: “nos tememos que el fin de las ayudas del Gobierno al transporte público suponga un incremento del uso de coche y moto, y por tanto más tráfico en las ciudades, con todo lo que eso implica: ruidos, contaminación, deterioro de la salubridad en los entornos urbanos…”