Ábalos niega haber cobrado mordidas y cuestiona los audios de su exasesor Koldo ante el Supremo
Un paso más en el caso Koldo
José Luis Ábalos ha comparecido este lunes por tercera vez ante el Tribunal Supremo en el marco del caso Koldo, la presunta trama de adjudicaciones irregulares de obra pública y cobro de comisiones en el Ministerio de Transportes. Durante hora y media de declaración, el exministro ha negado haber recibido mordidas y ha asegurado no reconocerse en los audios que lo relacionan con la trama.
Ábalos ha respondido únicamente a las preguntas de su abogado, del juez Leopoldo Puente y del fiscal Alejandro Luzón, dejando fuera a las acusaciones populares, lideradas por el PP, que han solicitado su ingreso en prisión provisional. La Fiscalía, sin embargo, no ha avalado esta medida y ha propuesto mantener las medidas actuales o imponerle una fianza.
"No me reconozco en esos audios"
Uno de los puntos más delicados de la comparecencia han sido las grabaciones realizadas por Koldo García, su exasesor, entre 2019 y 2023. Ábalos ha insistido en que nunca habría tenido ese tipo de conversaciones y ha planteado que los audios podrían estar manipulados. Según él, no se reconoce en ellos ni en las imputaciones del informe de la UCO, que sostiene que tanto él como Koldo podrían haber recibido hasta 620.000 euros de Acciona a cambio de contratos públicos.
Además, ha negado conocer de forma relevante a Claudia Montes, quien declaró haber sido contratada irregularmente en LogiRail, donde, según sus palabras, la sentaban “frente a una pared sin ordenador”.
Koldo guarda silencio ante el juez
Horas más tarde, ha sido el turno de Koldo García, quien se ha acogido a su derecho a no declarar tras haber solicitado —sin éxito— hasta tres aplazamientos. En su entrada al Alto Tribunal, ha recibido gritos de "corrupto" por parte del público.
Su abogado había cambiado recientemente, optando por la misma letrada que representa a su expareja y a su hermano, también investigados. El juez ha recordado en un auto que el investigado no puede marcar la agenda judicial y que su presencia es obligatoria siempre que sea requerida.
El juez descarta la prisión para Ábalos
Pese a las peticiones del PP, el magistrado ha decidido no aplicar prisión preventiva al exministro. Las medidas cautelares vigentes —retirada de pasaporte, prohibición de salir de España y comparecencia quincenal ante el juzgado más cercano— se mantienen. La Fiscalía propuso incluso añadir una fianza, pero sin concretar la cantidad.
Ábalos, visiblemente afectado, ha explicado que el proceso judicial le está afectando a nivel personal y ha expresado su voluntad de colaborar con la justicia. Según fuentes jurídicas, ha reiterado que no tenía competencias directas sobre las adjudicaciones investigadas y ha señalado que ni Koldo ni Santos Cerdán, también implicado, podían influir en dichos contratos.
Reacciones políticas: fuego cruzado
El caso ha reavivado las tensiones políticas. Yolanda Díaz ha arremetido contra el PP por poner en duda la limpieza de las elecciones generales: “Feijóo hace de la mentira un arte político”, ha dicho en una entrevista. La vicepresidenta ha recordado que en el auto judicial no se afirma que el PSOE amañase comicios.
En la otra orilla, Alberto Núñez Feijóo ha acusado a Sánchez de intentar “acabar con la independencia judicial” y “destruir la UCO”. Para el líder del PP, el caso Koldo “afecta a las entrañas del Gobierno” y ha calificado al Ejecutivo como “el más corrupto que ha tenido España”.
Desde Podemos, Pablo Fernández ha ido más allá: “No es el caso Koldo, es el caso PSOE”, asegurando que la formación morada ya no se considera socia del Gobierno. Ha advertido que “saldrán más ramificaciones” en otras comunidades.
La reacción del PSOE: control de daños
Mientras tanto, Ferraz ha confirmado que tras estallar el escándalo bloquearon el correo de Santos Cerdán, cambiaron la contraseña, impidieron su borrado y realizaron una copia de seguridad que entregaron a la UCO. Han aprovechado para recordar que el PP destruyó discos duros a martillazos en su día.
Por su parte, la ministra Diana Morant ha sido tajante: “Nos han fallado tres personas y hemos actuado con contundencia”. Se refiere a Koldo, Ábalos y Cerdán, a quienes ha calificado directamente de “sinvergüenzas”.
Una causa que no se detiene
El juez ha rechazado también que el Gobierno de Navarra se persone como acusación particular en el proceso, al no justificar que sea parte perjudicada directa. De momento, la investigación sigue su curso tras la reciente entrega del informe de la Guardia Civil, que refuerza las sospechas de una trama de sobornos y adjudicaciones fraudulentas en el seno del Ministerio de Transportes.
La causa avanza con nuevos frentes abiertos y con una presión política creciente que amenaza con agrietar todavía más los equilibrios del Gobierno.