Lecciones de Aznar sobre economía: "Bajar impuestos"

En un ambiente distendido en plena sierra madrileña (Guadarrama), decenas de medios de comunicación y periodistas esperaban la llegada del expresidente del Gobierno y presidente de FAES, José María Aznar. Junto a él estaban miembros de su partido como Javier Fernández Lasquetty, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid; Pablo Casado, presidente de Nuevas Generaciones en Madrid y diputado del Congreso por Ávila, o Carlos Aragonés, diputado por Madrid.

FAES los había reunido a todos entorno a la mesa redonda con el título: "Una reforma fiscal para el crecimiento económico". El objetivo: "Pocos impuestos, bajos y sencillos para volver al crecimiento y el empleo". El exjefe del Ejecutivo ha abierto escenario presentando los diferentes informes elaborados por la Fundación y se ha centrado en la exposición del informe de reforma fiscal. Como ya hizo en su reaparición en Antena 3, hace más de un mes, y en una entrevista concedida a ABC hace dos días, reafirma la necesidad  de "hacer una reforma fiscal amplia y profunda que cambie mucho los parámetros existentes  y que sea sobre todo útil para el crecimiento y para la creación de empleo". Una vez más ha apuntado que es partidario de llevar a cabo la renovación por el buen resultado que tuvieron las reformas fiscales de los años 1998/1999 y 2002/2003 en las que predominaron las bajadas de impuestos. Con un tono de voz tranquilo y firme ha finalizado su intervención reivindicando que cada vez son menos las voces que se oponen y niegan una reforma en España y que desde esta casa, "cumplimos una de nuestras responsabilidades al presentar a la sociedad española una reforma completa".

El acto ha estado dirigido por el director de Economía y Políticas Públicas de la Fundación, Miguel Marín que instó en que es una necesidad eminente contribuir a una reforma del sistema fiscal tras dieciocho meses de respuestas de una herencia desastrosa recibida del anterior gobierno. Para alcanzar las conclusiones, el informe, se dota de una enmienda al sistema tributario actual y a la vía de reforma en que se había introducido el sistema fiscal en España. Sus últimas palabras apuntan al análisis de las principales figuras impositivas del sistema tributario español, que representan el 90%.

Pero ha sido el diputado y presidente de la Comisión de Hacienda y Administraciones Públicas del Congreso, Gabriel Elorriaga, y José Félix Sanz, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid, los responsables de esta mesa redonda. Sanz ha expuesto los fundamentos técnicos de la reforma señalando que desde el inicio el compromiso ha sido "fomentar, huir de la conjetura y la opinión no contrastada desde el rigor académico". La intervención ha girado en torno a tres aspectos: el debate actual de reforma impositiva y resaltar los principales motivos de reforma que deberían impregnar el sistema fiscal; la evidencia de que en el IRPF existe la curva de Laffer; y enunciar propuestas específicas para las principales figuras impositivas que caracterizan el sistema español.

Además, Sanz, ha establecido tres preguntas muy precisas y concretas: "En la actual coyuntura económica, ¿cuál debe ser el objetivo prioritario de una reforma fiscal?; ¿Hay que subir o bajar los impuestos?;  ¿Para cuándo la reforma fiscal?". Sus respuestas han sido directas y sin pelos en la lengua ya que defiende que el crecimiento económico y el empleo requieren algunas floraciones sobre su interpretación. Refiriéndose a los impuestos, asegura que no todos son agresivos al crecimiento pero "desafortunadamente" los principales impuestos presentan muy escasa capacidad recaudatoria: "Estamos en el peor de los mundos posibles". Finalizó su intervención ratificando que la reforma fiscal es "para hoy mejor que para mañana, cuanto antes mejor".

Estas son las recetas presentadas por José María Aznar y su equipo de FAES para el presidente del Gobierno Mariano Rajoy, aunque este ya ha comenzado una reforma que estará culminada en marzo de 2014 como anunció el Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en un Congreso de Ministros el pasado mes de junio.