El coste de las bajas laborales se ha disparado desde 2019
El último informe anual del Banco de España constata que el coste derivado del pago de las prestaciones de incapacidad temporal (IT) ha aumentado cerca de un 80 % desde 2019.
El Banco de España ha presentado su informe anual de 2024. Según datos de la Contabilidad Nacional, el año pasado el coste derivado del pago de las prestaciones por incapacidad temporal era un 78,5 % más elevado que en 2019.
El coste para la Administración fue de algo más de 15.000 millones de euros (casi un 1 % del PIB). El coste directo para las empresas alcanzó los 4.613 millones de euros, un 62 % más que en 2019.
Una "pandemia" de bajas laborales
El mercado de trabajo ha cambiado de forma importante tras la pandemia. Entre 2021 y 2022 se produjo el fenómeno conocido como "la gran dimisión", especialmente en Estados Unidos, con miles de personas dejando voluntariamente su puesto de trabajo. En Europa esta situación no fue tan común, pero sí se pudo apreciar un repunte en los ceses voluntarios.
El fenómeno que sí se ha dejado notar en España desde la pandemia es el incremento de las bajas médicas. Especialmente en el caso de las incapacidades temporales derivadas de enfermedad común.
En 2019 un 2,7 % de las personas ocupadas estaban en situación de incapacidad temporal. En 2024 el porcentaje pasó a ser del 4,4 %.
Ángel Gavilán, el que hasta hace unos días era director de Economía y Estadística del Banco de España (permanecerá en su puesto hasta el 12 de junio), ha señalado al deterioro de la salud de los trabajadores tras la pandemia y al propio ciclo económico (históricamente, la incapacidad temporal ha sido mayor durante los períodos de expansión) como principales razones de este incremento de las bajas.
Más bajas en todos los sectores y grupos de edad
El informe destaca que han aumentado las bajas por IT en diferentes grupos de edad, sectores de actividad y en todas las regiones.
Antes de la pandemia la incapacidad temporal era más habitual entre las mujeres frente a los hombres, las personas de nacionalidad española frente a los extranjeros y los trabajadores de mayor edad frente a los de menor edad. Sin embargo, en los últimos cinco años se ha producido un repunte generalizado de las ausencias por IT en todos los grupos de población.
Por sector de actividad, se puede apreciar un patrón generalizado de aumento de las bajas por IT. La agricultura, las manufacturas, la construcción, el comercio, el transporte y el suministro de agua y saneamiento han visto aumentar sus bajas por incapacidad temporal de manera notable. Como excepción, este tipo de bajas laborales han descendido en las industrias extractivas y en las actividades de suministro de energía.
Por comunidades autónomas, destacan especialmente los casos de País Vasco, Galicia, Cantabria y Murcia, que encabezan el ranking del incremento de bajas.
Las bajas por salud mental siguen aumentando
Según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, casi una de cada diez bajas laborales registradas en España durante 2024 tuvo su origen en trastornos mentales, del comportamiento o del desarrollo neurológico.
Los trastornos psicológicos están ya en el "top 3" de los que más días de incapacidad generan al cabo del año. De media, unas 108 jornadas. Solo los tumores y las enfermedades cardiovasculares provocan ausencias laborales más largas.
Según un estudio del Instituto de Investigación en Atención Primaria Jordi Gol i Gurina, las bajas por salud mental le costaron al Estado 59,2 millones de euros entre 2020 y 2022.
Desde la pandemia, el incremento en el número de bajas médicas por problemas psicológicos ha sido de un 80 %.
Las vacantes: otro problema para el mercado laboral
Además del gran número de bajas médicas que se han registrado en los últimos años, el mercado laboral enfrenta otro problema que puede afectar a su crecimiento: la ausencia de perfiles profesionales aptos para cubrir determinadas vacantes.
Según una encuesta del Banco de España, el porcentaje de empresas que manifiestan no encontrar mano de obra ha pasado del 10 % registrado en 2021 a un 43 % en 2024. Esta escasez de trabajadores es especialmente relevante en la hostelería y en la construcción, donde más del 50 % de las empresas declaran tener problemas para encontrar mano de obra.
A fin de intentar mejorar la situación, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) está trabajando en mejorar la información disponible sobre ofertas y vacantes de empleo mediante un registro estatal al que las agencias privadas de empleo, las ETT y los portales de empleo tendrán que volcar sus datos.