Hormigos intenta que la Esteban caiga en el Olvido
Empezó entrando casi con calzador y a este paso no la van a echar ni a patadas. Olvido Hormigos ha comenzado su carrera televisiva como un boxeador fajador, sabiendo recibir los golpes, y quien sabe si a este paso terminará siendo toda una estilista. La chica se ha propuesto que el mundo del quore televisivo olvide incluso a la "princesa del pueblo" y parece dispuesta a que el populacho la haga directamente la reina de la pequeña pantalla (la "superiora" incluso de las de las mañanas).
La ex concejala a la que no le importaba que la lapidaran públicamente con tal de salir en televisión no sólo va capeando cada vez mejor el temporal de descalificaciones que la lanzan sino que incluso va a poder pasar al contrataque con su propia sección en "Sálvame", como si de la mismísima Belén Esteban se tratara. Lo malo para ella es que con "La caravana de Olvido", con la que la Hormigos va a tratar de buscar el mejor cuerpo del verano, ya sea en fiestas, playas o discotecas durante todo el estío, todo puede volvérsele de nuevo en su contra, a poco que se desmadre como ella solo sabe hacerlo.
Y es que ahí puede estar su problema ya que, consciente de que la de San Blas, todavía en el dique seco, puede reaparecer en cualquier momento, sabe que es ahora cuando tiene que poner toda la carne en el asador, aunque se queme más de la cuenta, para intentar ir ganándose el beneplácito y, sobre todo, el corazón de tan particular audiencia.
De momento ha conseguido que sus tramas en "Sálvame" sean las más moviditas y más seguidas por los telespectadores, como antes eran las de la "princesa". Ella ya ha declarada estar "dispuesta a todo", con la única excepción del porno (lo suyo con los móviles lo considera erotismo), y que le encantaría trabajar en un "reality", así que a poco que su estrella siga brillando no sería de extrañar que pronto la viéramos en "Acorralados" o algún formato similar. Lo único que necesita para ello es seguir haciendo méritos, sobre todo si éstos se producen más fuera que dentro de los platós.