Barcelona vive en la noche de este sábado un nuevo episodio de actos vandálicos al acabar una manifestación en apoyo al rapero Pablo Hasel y en demanda de una nueva política de gestión de la policía, disturbios en los que se ha detenido hasta el momento a diez personas, se han lanzado cócteles molotov contra el cuartel de la Guardia Urbana en las Ramblas y se han saqueado comercios y causado daños en un hotel.
"Siempre al lado del ejercicio de los derechos y las libertades de manera pacífica -dice Aragonés en su mensaje-. Nunca con los actos vandálicos o la violencia".
El vicepresidente catalán concluye afirmando que "el saqueo o destrozo de comercios, la quema de mobiliario o el ataque a trabajadores públicos no son ni libertad de expresión ni de manifestación".