La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha afirmado hoy en la rueda de prensa, a preguntas de Estrella Digital, que no tienen previsto nacionalizar empresas importantes o tomar participaciones en alguna de ellas ,en vista de la crisis ecónomica que a raíz de la pandemia se está produciendo a nivel mundial y especialmente en España. En sus declaraciones ha manifestado, "Desde el Gobierno, lo que está haciendo es un seguimiento muy exhaustivo , de aquellas empresas estratégicas, de sectores críticos como el aéreo o de la energía". "No hay ninguna decisíón para tomar un participación en ninguna de ellas"
Por lo que se aprecia, desde el Gobierno prefieren ser cautos y no precipitarse en la toma de decisiones. Por lo que seguirán analizando muy estrechamente la evolución de dichas compañías.
La crisis sanitaria esta provocando una recesión económica muy importante, por lo que hay empresas que se están viendo más afectadas, dependiendo de la actividad que realicen. Las que más están sufriendo son las que se engloban en el sector turístico, y todo lo relacionado con él, y que supone un 14% del PIB de España.
Una de las compañías que más perjudicada se está viendo es IAG, la antigua Iberia, como consecuencia del parón turístico y la reduccíón casi a 0 de vuelos, provocado por el confinamiento de la población. Las restricciones impuestas a los viajeros, muy especialmente en el caso de Reino Unido, impide la recuperación de la demanda de viajes. Las caídas en bolsa de la compañía ascienden un 70% durante este año.
Con el fin de de apoyar al sector productivo, en el caso de Alemania, el Gobierno Germano ha decidido invertir 9.000 millones de euros con el fin de ayudar a la empresa, y tomará una participación del 25% de la misma. En espera de que la economía se recupere y pueda vender el paquete de acciones en el futuro cuando la aerolínea alemana consiga reanudar su actividad con normalidad y volver a beneficios.
En el caso de España, según vayan evolucionando los acontecimientos se comprobará si el Gobierno ha tenido finalmente que salir al rescate de alguna compañia estratégica con el fin de evitar una posible quiebra o que necesite ayuda financiera para salir adelante con su actividad.