Nervios y piques en el entrenamiento del Real Madrid en Irlanda
Es un clásico de cada pretemporada. No hay partidos de entrenamiento con piques en los que no estén metidos Salgado o Heinze. Quejas al entrenador, que suele actuar de colegiado, mientras ve como la intensidad sube según se incrementa la competencia.
De hecho hace un año, Bernd Schuster no solía enfrentar a sus dos defensas de más carácter y los juntaba en el mismo equipo en los días de entrenamientos a puerta abierta de pretemporada.
El día siguiente al debut, el Real Madrid se entrenó sin Pepe, que sufre un golpe, y con un grupo de jugadores que se ha reducido a 29 tras la marcha de Javi García al Benfica, a cambio de siete millones de euros.
No estuvieron con el grupo los holandeses Arjen Robben y Wesley Sneijder, que arrastran pequeñas molestias físicas, ni Mahamadou Diarra y Ruud Van Nistelrooy, que a sus largas series de carrera ya le suman ejercicios con balón y en la mañana de este martes comenzaron a chutar a portería.
"Ya me queda poquito. Tengo muchas ganas de volver con mis compañeros. A ver si me siguen queriendo", bromea con Efe Mahamadou Diarra, que sabe que desde que se lesionó hace seis meses la competencia ha subido en el centro del campo y tendrá que ganarse un hueco sino quiere ser traspasado.
El penúltimo día en Irlanda dejó un disputado partido en reducidas dimensiones, en el que Manuel Pellegrini insiste en el toque y la rapidez ya que sus jugadores no pueden tocar el balón en más de tres ocasiones seguidas.
Quejas de Heinze a Pellegrini
Karim Benzema, que jugó acompañado en ataque de Cristiano Ronaldo y Gonzalo Higuaín, sigue de dulce al materializar dos tantos, aunque las anécdotas estuvieron en las quejas continuas de Heinze a Pellegrini y el pique del que saltaron chispas entre Higuaín y Salgado.
Se desquitó el delantero argentino marcando un bello tanto repleto de potencia, marchándose de la defensa en velocidad y superando al portero canterano Tomás Mejías con un regate para marcar a puerta vacía el tanto del triunfo.
Los jugadores del Real Madrid comieron fuera del hotel de concentración y disponen de la tarde libre. Pellegrini y su equipo de trabajo la aprovecharán para enfrentarse a los enviados especiales en el clásico partido ante la prensa de pretemporada.