El acuerdo social marca el inicio de nuevas reformas
“Garantizar la sostenibilidad del sistema y la cohesión social”, es la máxima que Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo dicen que ha presidido todas las negociaciones del principio de acuerdo en pensiones y pacto social alcanzado en la madrugada de hoy.
La voluntad de llegar a acuerdos de los dos principales sindicatos, UGT y Comisiones Obreras, el nuevo talante del equipo directivo de la CEOE con Joan Rosell al frente, el papel moderador del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez y la implicación del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, parecen haber sido los principales ingredientes que, cocinados durante los últimos 15 días, han dado lugar al gran pacto social que todavía se tiene que seguir guisando.
Las inevitables reformas, que han pasado en estos meses una elevada factura al Gobierno, se hacen pues con el apoyo de los agentes sociales, lo que las va a hacer más llevaderas desde el punto de vista político. El decreto aprobado por el Consejo de Ministros lanza un mensaje a los mercados y a la Unión Europea sobre la capacidad del país de alcanzar acuerdos en materias tan complicadas como la edad de jubilación o la reforma laboral. La reacción en Bolsa fue tímida pero positiva, aunque los mercados a veces leen de otra manera esos mensajes.
En los próximos días se tienen que dar nuevos acuerdos que también son muy importantes: las políticas de empleo tienen que ser debatidas, el gran acuerdo sobre política industrial y energética está por negociarse, así como la hoja de ruta en materia de ciencia e innovación y el desarrollo de muchos de los aspectos de la reforma laboral.
El acuerdo llegó a la par que los datos de la Encuesta de Población Activa, que cifra en 1.328.000 los hogares en los que todos sus miembros están en paro. Es decir, el 8,8% más que en 2009. La creación de empleo es el principal reto que se van a marcar los agentes sociales, porque son conscientes de que “ningún sistema, ni de pensiones ni de previsión social, aguanta con una tasa de paro superior al 20%”, dicen los sindicatos.
El anteproyecto de Ley sobre Actualización, Adecuación y Modernización del Sistema de Seguridad Social asume las recomendaciones del Pacto de Toledo acordadas el pasado martes y contempla la necesidad de hacer compatibles los objetivos de consolidación y estabilidad presupuestaria (es decir, los de déficit público) con los de plena financiación de las prestaciones no contributivas y universales, que seguirán a cargo de los Presupuestos Generales.
El Gobierno ha anunciado la creación de un grupo de trabajo formado por expertos de Trabajo, Economía y agentes económicos y sociales para analizar posibles escenarios de financiación complementaria al sistema de la Seguridad Social. El texto incluye, además, que las Mutuas hagan un mayor seguimiento de las bajas con una duración inferior a 15 días, algo que había generado fuertes resquemores durante la negociación de la reforma laboral.