Vicente Rambla, exvicepresidente valenciano con Francisco Camps y actual diputado en Las Cortes de esa comunidad, ha admitido en un escrito dirigido al juez del ‘caso Urdangarin’ que fue la Generalitat la que pagó en marzo de 2008 una comida con el duque de Palma, quien por esas fechas llevaba ya dos años oficialmente alejado de Instituto Nóos. El escrito de Rambla llega después de que, el pasado día 13, asegurase en su declaración como testigo no recordar quién había abonado el almuerzo. Otra testigo, la exconsellera de Deportes, la hoy diputada autonómica Trinidad Miró, señaló que la comida había sido reservada por el Ayuntamiento de la capital valenciana.
El escrito de Rambla, al que ha tenido acceso Estrella Digital, presenta su respuesta en el interrogatorio como fruto de «un error absolutamente involuntario». La comida, en la que se plantó la opción de que el duque de Palma organizase los Juegos de la Juventud una vez que el proyecto de Juegos Europeos había decaído, se celebró el 3 de marzo de 2008. Y la pagó, precisa ahora el exvicepresidente valenciano, la Conselleria de Presidencia.
Con esta aclaración, Rambla se adelanta a la vista de que el juez ha pedido no sólo las facturas de los dos almuerzos que en 2008 mantuvieron las autoridades valencianas con el yerno del rey sino las agendas oficiales que para esos días tenían la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el entonces vicepresidente de la Generalitat.
El juez, que con este paso estrecha el cerco judicial y psicológico en torno a la Generalitat y el Consistorio valenciano, pretende averiguar si aquellas citas tuvieron carácter oficial, así como cuántos comensales se reunieron en torno a la mesa -en teoría, no acudió Camps- y, de paso, cuál fue el coste de ambos eventos para el erario público valenciano.
Entre 2004 y 2006, la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia pagaron a la ONG de Urdangarin 3,5 milllones de euros. Los pagos más importantes -3,1 millones- se correspondieron con la organización de tres minicumbres turístico-deportivas, las llamadas Valencia Summit. El resto -382.000 euros- fue lo que cobró Instituto Nóos por supuestos trabajos para diseñar unos Juegos Europeos. La compiteción, para cuyo montaje la Generalitat había comprometido nada menos que seis millones, no llegó a celebrarse pero la ONG del duque y su socio, Diego Torres, percibió los citados 382.000 euros por tareas preparatorias que el juez y el fiscal investigan con lupa.